El Club Waterpolo Málaga acabó con un buen sabor de boca su Fase de Permanencia en la Segunda Nacional, al vencer al Club Natación Las Palmas, a domicilio, en un ajustado y emocionante encuentro (16-17), y alzarse con el título de la fase regular de esta Liga de Permanencia en la tercera categoría del waterpolo nacional.
Bonito broche a una temporada que no pudo tener el premio del ascenso, pero que ha concluido con grandes sensaciones, un bloque compacto que gana con los jóvenes que suben, y unos números que invitan al optimismo. No en vano, esta fase termina con ocho victorias en diez partidos, y nada menos que 126 goles a favor, siendo el conjunto más efectivo de la categoría.
El duelo se decidió en los ataques, con dos equipos muy efectivos de cara a portería, pero con unos malagueños que no cejaron en su empeño a pesar de caer en los dos primeros cuartos; y viendo cómo perforaban su portería hasta en 11 ocasiones (6-3 y 5-4). Los de Wil Sánchez aprovecharon los huecos y el mayor poderío físico acumulado en esta parte final de la temporada, para no tirar la toalla y dar el golpe final en los últimos cuartos.
Anotar siete goles en un periodo está al alcance de muy pocos, y eso lo firmó el Waterpolo Málaga en el tercer cuarto para ajustar el marcador y ponerse sólo a un gol. Mucho orden en la defensa y rapidez en el nado hacia la portería contraria. Esto, hizo además coger confianza para mandar en el último tramo y confirmar la remontada y el liderato final.
Los goleadores malagueños fueron Nahuel (8), Simón Cisneros, Nadir (4), Samu Ruiz, Raúl Gil (2), Álvaro Cruz para unos parciales de 6-3 / 5-4 / 4-7 y 1-3.
