Efectivos de la Policía Local de Málaga han detenido a un conductor natural y vecino de Málaga de 68 años como presunto autor de un delito de atentado, resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad, ya que, al parecer, aceleró el vehículo y llegando a pasarle una rueda por encima de un pie.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 00.15 horas de la noche del domingo al lunes 22 de julio en la confluencia de las calles Callejones del Perchel, avenida de la Aurora y glorieta Albert Camus, cuando agentes que prestaban servicio en ese punto de tráfico con motivo de la procesión de la Virgen del Carmen se encontraban desviando los vehículos por la glorieta Albert Camus para que volviesen por Callejones del Perchel.
Si bien todos los conductores entendían la situación y seguían las indicaciones de los policías locales, el conductor implicado en los hechos, que en un principio aminoró la marcha y parecía que iba a hacer lo propio, cambió de idea y aceleró repentinamente, obligando con ello a uno de los agentes a apartarse para evitar ser atropellado, aunque sin poder evitar que una de las ruedas del turismo le pasase por encima de un pie, tras lo que el conductor detuvo la marcha, según han informado desde la Policía Local a través de un comunicado.
Así, el policía local le indicó que parase el motor, solicitándole la documentación, negándose el conductor en todo momento, a la vez que le decía que no sabía quién era, que se le iba a caer el pelo.
Ante la actitud hostil, el agente se introdujo a través de la ventanilla y retiró las llaves de contacto del coche, abriendo la puerta del conductor, ante la negativa reiterada del implicado en bajarse y observando que portaba una funda con machete de montería.
El agente con ayuda de su compañero sacó al conductor del coche, resistiéndose el mismo activamente a colaborar con los agentes, procediendo a su detención, así como a retirarle el mencionado machete.
El individuo, en ese momento, pareció desmayarse, prestándose a ayudarlo una doctora que se apeó de un taxi, la cual, tras efectuarle un breve reconocimiento, manifestó que sus constantes estaban en orden, por lo que parecía estar fingiendo el desmayo.
Tras ser detenido, el conductor fue trasladado a un centro hospitalario donde se le asistió y expidió el pertinente parte facultativo, y posteriormente a dependencias del Grupo de Investigación de Accidentes y Atestados (GIAA) de la Policía Local de Málaga, donde se le practicó prueba de alcoholemia, si bien su resultado fue negativo. Finalmente fue puesto a disposición judicial. En cuanto al agente, no sufrió daños graves, siendo posteriormente asistido por la contusión sufrida en el pie.
