El Club Waterpolo Málaga lo tuvo muy difícil ante el Claret Askartza de Bilbao en el partido de Primera Nacional masculina disputado hoy en Inacua Málaga. Con buenas defensas y controlando durante algunos minutos, se soñó incluso con remontada, que se disipó en dos periodos finales que se basaron en una gran efectividad visitante.
El partido comenzó con muchas dudas por parte local y dos goles visitantes muy tempraneros marcaron el tempo del juego y del marcador. Con un 1-3 en el primer periodo, quedaba claro que los vascos aprovecharon mejor sus oportunidades y se mostraban más tranquilos. El CW Málaga mantenía la calma para no entrar en pérdidas de balón, que hubo demasiadas en los primeros compases, y junto a las paradas del portero visitante, hacían que el control siguieran siendo visitante.
Hasta que llegaron las jugadas por la izquierda en el ataque visitante, abriendo un hueco de pases y buenas combinaciones para tiros perfectos y dos goles de Sito, Álvaro Cruz y José Cotos que remontaron el marcador poco antes del descanso (4-3). Los blocajes defensivos y las paradas de los porteros antes del descanso también fueron importantes en un encuentro con pocas expulsiones.
El comienzo del tercer cuarto fue de las defensas, los palos y los porteros para un empate visitante que hizo más emocionante el resto del duelo. Mucho más cuando dos lanzamientos visitantes en dos jugadas aisladas cambiaron la balanza del marcador, que volvió a igualar Sito en otro ataque vertiginoso. 5-5 en el minuto 6 del tercer cuarto. Dos equipos atrevidos y un duelo de altísimo nivel, que se decidiría por pequeños detalles, como una pérdida en el área local, que aprovecharon los visitantes para el 5-6.
Todo para el último cuarto con dos equipos encorajinados y aprovechando bien los ataques, sobre todo desde los extremos. Un parcial de 1-1 en el primero minuto del último cuarto dejaba todo por decidir, con un 6-7, que levantó a la grada en el periodo decisivo y provocaba situaciones polémicas. De hecho, de una jugada muy rigurosa de penalti en el área local se pasó al 6-8 que volvía a abrir brecha en el marcador. El 6-9 posterior, a cargo de un Jokin Belmonte en racha, hizo que ya la distancia fuera insalvable, hasta el 8-12 final.
