- La violencia contra los profesionales de enfermería sigue en aumento. En 2024, se registraron 318 agresiones a sanitarios en la provincia de Málaga, de las cuales 69 fueron físicas y 249 verbales, lo que supone un 14% más que en 2023. Ante esta preocupante realidad, el Colegio de Enfermería de Málaga reclama medidas urgentes para frenar esta escalada, incluyendo más seguridad en los centros sanitarios, sanciones ejemplares para los agresores y su reincorporación en las mesas provinciales de trabajo sobre agresiones.
Coincidiendo con el Día Europeo contra las Agresiones a Profesionales Sanitarios, el Colegio denuncia que la violencia contra el personal de enfermería sigue sin recibir la respuesta contundente que necesita por parte de las administraciones.
Más de una agresiónes a enfermeros al día en Málaga
Los datos reflejan que en Málaga se produce casi una agresión diaria a sanitarios, siendo los enfermeros y enfermeras los más afectados. La mayoría de los ataques registrados en 2024 fueron agresiones verbales (80%), con amenazas, insultos y coacciones, mientras que el 19% de los casos derivaron en violencia física.
«Es inadmisible que nuestros profesionales tengan que acudir a su puesto de trabajo con miedo a sufrir una agresión. Exigimos que se refuercen las medidas de seguridad en los centros sanitarios, se apliquen sanciones ejemplares y se implemente un plan real de prevención y actuación ante estas situaciones», afirma José Miguel Carrasco, presidente del Colegio de Enfermería de Málaga.
El Colegio también advierte de que los datos reportados podrían ser aún mayores, ya que muchas agresiones no se denuncian por miedo a represalias o por considerar que forma parte del día a día asistencial.
El Colegio de Enfermería de Málaga, fuera de las mesas de trabajo sobre agresiones
Uno de los principales problemas para abordar esta crisis es la falta de acceso a información detallada sobre las agresiones en la provincia. Hasta hace unos años, el Colegio de Enfermería de Málaga participaba en las mesas provinciales sobre agresiones, espacios en los que se trabajaba conjuntamente con la Administración, los cuerpos de seguridad y otros colectivos sanitarios para buscar soluciones y mejorar la protección de los profesionales.
Sin embargo, la Junta de Andalucía ha excluido a los colegios profesionales de estos foros, limitando el acceso a datos oficiales y reduciendo la capacidad de actuación del Colegio en esta materia. «A pesar de que siempre hemos estado en estas mesas, ahora ya no se nos convoca ni se solicita nuestra opinión. Esta exclusión supone una pérdida de información clave para actuar con mayor eficacia en la protección de nuestros colegiados», lamenta Carrasco.
Pese a esta situación, el Colegio mantiene una colaboración estrecha con la Policía Nacional y la Guardia Civil, con el objetivo de reforzar la seguridad en los centros sanitarios y ofrecer apoyo inmediato a los profesionales agredidos.
Teléfono 24 horas para profesionales agredidos
El Colegio recuerda a todos los enfermeros y enfermeras que no están solos ante una agresión y pone a su disposición un teléfono 24 horas de asistencia (690 948 815), a través del cual pueden recibir asesoramiento jurídico gratuito y apoyo inmediato.
«Cada agresión que no se denuncia es un agresor que sigue actuando con impunidad. Animamos a todos los compañeros a denunciar cada caso y a contar con el respaldo del Colegio. No podemos permitir que la violencia se normalice en nuestro trabajo», subraya Carrasco.
Solidaridad con todos los agredidos
Los profesionales de Enfermería no somos la única profesión que sufre las agresiones en el ejercicio de sus funciones; por ello, siempre hemos mantenido nuestro compromiso de solidaridad con todos aquellos profesionales, tanto sanitarios como no sanitarios, que desempeñan su labor profesional en el ámbito de la salud. “Siempre estaremos al lado de los agredidos, con independencia del colectivo al que pertenezcan”.
Llamamiento a la tolerancia cero contra las agresiones
Desde el Colegio de Enfermería de Málaga se insiste en la necesidad de concienciar a la sociedad sobre la importancia de respetar a los profesionales sanitarios. «Las enfermeras están para cuidar, no para ser agredidas. Pedimos a la Junta de Andalucía que refuerce la seguridad en los centros sanitarios y nos permita volver a formar parte de las mesas de trabajo sobre agresiones. Si queremos acabar con esta lacra, es necesario que todos trabajemos juntos», concluye Carrasco.