- El sindicato ha reclamado el traslado del interno agresor y denuncia la falta de medidas de seguridad eficaces en las prisiones, así como la política de excesiva permisividad de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, primera fuerza sindical en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, quiere manifestar su rotunda condena ante la agresión sufrida por tres profesionales penitenciarios en el módulo 3 del Centro Penitenciario Málaga II, en Archidona, este martes.
El interno atacó violentamente a los funcionarios de servicio, quienes, gracias a su rápida intervención “lograron sofocar la situación con el apoyo de otros compañeros, inmovilizando al recluso agresor según el protocolo a seguir siendo trasladado provisionalmente al módulo de aislamiento”. Como consecuencia de esta agresión, tres trabajadores penitenciarios han resultado heridos con lesiones de diversa consideración, por lo que han necesitado atención médica.
La sección sindical de CSIF en la prisión de Archidona destaca la profesionalidad y compromiso de estos trabajadores, cuya intervención fue clave para evitar una situación de mayor gravedad.
Igualmente, ante este nuevo episodio de violencia hacia los trabajadores, la sección sindical ha reclamado “el traslado inmediato del preso agresor, con el fin de evitar un efecto llamada que ponga en peligro la seguridad del centro y del personal”. Asimismo, ha denunciado la política penitenciaria de excesiva permisividad impulsada por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, que está dejando desprotegidos a los profesionales del ámbito penitenciario.
Sección Sindical de CSIF
En este sentido, la sección sindical de CSIF en el centro reitera sus demandas para garantizar la seguridad y dignidad de los trabajadores del sistema penitenciario, como el reconocimiento de los funcionarios penitenciarios como agentes de la autoridad; la actualización de los medios coercitivos, incluyendo la implantación de pistolas táser para una actuación más eficaz ante episodios violentos; el incremento de la plantilla, cubriendo el 100% de las vacantes y adecuando las Relaciones de Puestos de Trabajo (RPT) a la realidad de los centros penitenciarios; formación continua y de calidad para dotar a los profesionales de las herramientas necesarias para afrontar situaciones de riesgo; y unas retribuciones justas para todos los trabajadores penitenciarios, en reconocimiento a su labor esencial.
CSIF ha reiterado su apoyo a los compañeros agredidos y ha exigido a la Administración Penitenciaria medidas eficaces para frenar la violencia y garantizar la seguridad en los centros penitenciarios.