Sánchez hizo esta consideración en el Pleno del Congreso, donde fue preguntado al respecto por el líder de Vox, Santiago Abascal, quien también planteó la ausencia del presidente en las sesiones de control y si estas sirven para algo al no darse respuestas desde el Gobierno.
Sobre las supuestas llamadas a empresas para favorecer a su mujer, Sánchez criticó que Abascal le preguntase por esto “sin ningún tipo de prueba” y apuntó que debe ser el líder de Vox el que “demuestre” lo contrario.
Al mismo tiempo, el jefe del Ejecutivo preguntó si por el “tono amenazante” de Abascal debía suponer “que me va a llevar a la cárcel” y que otros miembros del Gobierno y del PSOE van “a acabar todos en el banquillo”.
“ESPARCIR LODO”
Sánchez también defendió que las sesiones de control “tienen una enorme utilidad” y que en un régimen democrático es necesario “rendir cuentas ante la oposición”.
Añadió que el Pleno del Congreso sirve “para conocer cuál es el proyecto político de quien hace esa pregunta” y que, en el caso de Vox, se trata de un planteamiento caracterizado por el “racismo”, el “negacionismo” e “ir en contra de los valores democráticos”.
Por su parte, Abascal afirmó que la respuesta de Sánchez sobre supuestas llamadas a empresas para favorecer a su mujer demostraba que “no solo ha perdido el control de sí mismo, sino que no acepta ningún tipo de control”.
El responsable de Vox también reprochó al presidente que no respondiera a una pregunta que tiene “relevancia política”, al tiempo que le acusó de “esparcir lodo aquí y en Valencia”.