Acompáñame a conocer algunos retazos de este hombre, ejemplo de superación y modelo de humanidad.
>>> Corría el mes de Octubre cuando conversando con un compañero de trabajo, mientras tomábamos el café de medía mañana; me habló de una persona, en concreto de un escritor que también era locutor de radio, sobre el que yo había leído algún libro.
Sabía que se dedicaba al género histórico, pero no conocía mucho más ni sobre su vida, ni sobre su obra. Comentaba apasionado cómo muchas noches se quedaba dormido escuchando sus relatos: “Pasajes de la Historia” , «Mujeres de la Historia»…
Es un conversador nato sobre cualquier tema, pero este en concreto le llena, se le escapa a borbotones, cuando encuentra un interlocutor digno de contrastar información, una persona capaz de escuchar, algo tan interesante que forma parte de nuestras vidas.
Si la Historia no existiera, no lo haríamos nosotros tampoco por qué somos parte de ella, un eslabón de su cadena; cada día, a veces cada hora, cambia la historia del universo. A cada momento los nuevos descubrimientos dan luz a nuevas etapas de nuestra historia y de nuestra vida.<<<
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…Y hubo una persona que fue capaz de transmitirlo de una manera muy especial, no solamente plasmándolo en el papel con su pluma, sino también a través de las ondas, de la radio.
Fue reconocido como un gran interlocutor, habiendo recibido varias menciones, entre ellas la creación de un bosque con su nombre en Riba de Saelices, en la provincia de Guadalajara y la composición de una canción llamada “La Rosa de los Vientos”, en la que colaboro Fernando Ponce de León, además por supuesto de muchos premios por su labor de escritor e interlocutor y comunicador difundiendo también temas de ecologismo junto con ADENA aunque para él lo realmente importante y de lo que se sentía muy orgulloso era de la lealtad de su gran número de oyentes.
A titulo póstumo recibió la medalla de oro de Castilla La Mancha de difusión cultural.
Muchos de vosotros ya habréis nombrado en voz alta a esta interesante persona, “Juan Antonio Cebrián”.
Le dieron a conocer programas como “La red, Azul y verde y Turno de Noche.”. Pero el que le dio un verdadero reconocimiento fue “La rosa de los vientos” en la emisora Onda Cero, donde todavía hoy tenemos el gran placer de poder escuchar sus grabaciones.
Doce son los libros publicados durante su carrera como periodista. Entre sus publicaciones podemos mencionar: “El Misterio de Tutankamón”, ”Enemigos Íntimos de la Historia”, «El valor es cosa de mujeres», “La Cruzada del Sur” y por supuesto “Pasajes de la Historia” entre otras.
Leer es cultura. Tener un libro entre las manos pasando con los dedos cada página, es una linda sensación, pero escuchar la voz de este hombre narrando la historia que previamente o no, has leído en sus libros, es algo especial, transmite el conocimiento de una manera tan distinta, consigue que permanezcas atento, que captes cada pequeño detalle.
Silvia Casasola, su mujer durante dieciocho años y su más estrecha colaboradora, recuerda la vida de un gran periodista, luchador y trabajador infatigable, ejemplo de superación personal y de un gran hombre, modelo de bondad y dedicación a los demás y actualmente prosigue con el programa que comenzó su marido.
Vivió su infancia en Vicálvaro y la Elipa lugares de Madrid y con trece años perdió la visión en un ojo consecuencia de una enfermedad congénita llamada Von HIppel Lindau quedándose ciego años después.
Entra en la ONCE y estudia periodismo realizando posteriormente dos masters de radio. Comenzó con un programa de radio pirata que se llamaba “Lunes te odio” en Onda Lateral.
Si queréis saber algo más respecto a Cebrián no dudéis en acercaros por la Asociación Cultural Juan Antonio Cebrián, de la que por supuesto, soy miembro, os dejo el enlace.
Fuerza y honor era su lema, con él despedía sus emisiones radiofónicas.
@María José Luque Fernández.