El cuidado de las mascotas puede ser un verdadero problema en lo que respecta a su conciliación con el resto de nuestras responsabilidades diarias. También lo es durante los momentos especiales del año, como es el caso de las vacaciones. Por suerte, para cada problema hay una solución y las residencias caninas ya se han establecido como un recurso de gran valor para los dueños. Unos espacios en los que trabajan los mejores especialistas, quienes no solo se encargan de salvaguardar el bienestar de los perros, sino también de brindarles una bonita experiencia en su paso por la residencia canina.¡Veamos cómo te pueden ayudar estos resorts para animales!
Disfruta de tus vacaciones gracias a una residencia canina en Málaga
El principal problema que representa el hecho de tener una mascota llega cuando empiezan las vacaciones. Esta época del año es la única ocasión que tenemos para hacer viajes de larga duración; sin embargo, un perro no puede quedarse solo ni tan siquiera 24 horas. Motivo por el que no es de extrañar que recurrir a una residencia canina de renombre sea la mejor solución.
Estas residencias han sido creadas para acoger a muchos perros a la vez y garantizar que todos ellos disfruten de sus propias vacaciones. Tanto es así que muchas personas ya se refieren a dichos negocios como “resorts caninos”; lo cual genera la máxima tranquilidad en los dueños. ¡Viaja sin poner la vista atrás sabiendo que tu perro también lo va a pasar en grande!
Ahora bien, debes tener en cuenta que durante la temporada alta las plazas se suelen agotar rápidamente. La demanda por este tipo de alojamientos para mascotas no deja de crecer y, como tal, nuestra sugerencia es que te organices lo antes posible para reservar la habitación en las mejores residencias para perros en Málaga. ¿Tienes ya el hotel de tu próxima escapada? Estupendo, ahora solo queda hacer lo propio para tu mejor amigo.
No dejes solo a tu perro, acude a una guardería canina en Málaga
Salir por la puerta en la rutina laboral se puede convertir en toda una odisea cuando al otro lado se quedan nuestros animales de compañía. Razón por la que se ha generado una enorme popularidad entre las residencias que también operan a diario como guardería canina.
Este servicio es especialmente relevante cuando se trata de cachorros que todavía no están preparados para quedarse varias horas solos o cuando no puedes teletrabajar y necesitas una persona al cuidado de tu perro. En nuestra guardería de perros puedes dejar a tu mascota tanto tiempo como quieras, asegurando que allí recibirá el mejor de los tratos e incluso aprenderá a interactuar con otros huéspedes.
Por otro lado, si tu jornada laboral no entiende de horarios fijos y no puedes eludir tus responsabilidades profesionales o personales, este servicio también resulta de gran ayuda. No dejes que tu perro pase más tiempo de la cuenta solo: necesita pasear y hacer sus necesidades. Así que de nuevo encontramos una solución óptima tanto para ti como para tu mascota.
Can Resort, el mejor hotel para perros en Málaga
Fruto de la enorme demanda que está experimentando este sector, encontrar un buen hotel de perros no es tarea sencilla. Menos aún cuando se aspira a los más elevados estándares de calidad. No obstante, nos gustaría hablar de una de las mejores residencias caninas en Málaga en términos de calidad: Can Resort que, como su propio nombre indica, representa un alojamiento de primer nivel. ¡Las cinco estrellas de los perros!
Más allá de sus grandes instalaciones y del impecable equipo de cuidadores profesionales que allí trabaja, Can Resort ofrece una serie de servicios de gran interés que otras opciones del mercado no contemplan. Un claro ejemplo reside en el contacto directo del hotel canino con los dueños, quiénes pueden realizar hasta tres llamadas al día con vídeos para no perder la cercanía con tu perro incluso en la distancia.
Las zonas de juego y de piscina, la vigilancia durante 24 horas o las cómodas habitaciones con las que cuentan son otras tantas de las razones que han llevado a Can Resort a lo más alto. Un lugar mágico en el que los perros, a pesar de tu ausencia, disfrutan de la experiencia de principio a fin.