Los socialistas se reúnen con trabajadores que temen la pérdida de derechos laborales, además de una baja “considerable de personas y de recursos” en este caso para las personas sin techo de la ciudad, que se estiman en más de medio millar
El Grupo Municipal Socialista ha alertado por la “privatización” del servicio de asistencia a las personas sin hogar en el albergue municipal, localizado en el distrito de Carretera de Cádiz, donde además sus trabajadores estiman que “van a perder derechos laborales, como salario, y tendrán sobrecarga de trabajo por el recorte de plantilla”. Así lo ha explicado el portavoz socialista, Daniel Pérez, acompañado de las concejalas socialistas Rosa del Mar Rodríguez y Carmen Martín. La primera, responsable de Derechos Sociales, llevará a la próxima comisión de este jueves una solicitud de comparecencia al concejal responsable del área, Francisco Cantos, que “deberá explicar en qué consiste el cambio de modelo de funcionamiento y gestión del Centro de Acogida Municipal”.
Según el líder socialista, “más de 500 personas duermen al raso en Málaga”, luego “recortar recursos para la atención esencial de estas personas no es una buena noticia, tampoco para los trabajadores, que creen que se verán afectados sus derechos laborales tras la entrada de una empresa privada en la gestión”. Para Pérez, “los derechos sociales se deben blindar desde lo público, con el refuerzo de recursos y de plantilla, en vez de gestionar desde lo privado un servicio que a todas luces se verá reducido con el tiempo”.
Para la socialista Rosa del Mar Rodríguez, responsable del área de Derechos Sociales en el PSOE, “nos encontramos ante un servicio muy sensible, la acogida de personas sin hogar, que va a ser desmantelada gota a gota aunque el Ayuntamiento trate de vender la gestión privada como una mejora”. Tras examinar el pliego de condiciones del nuevo contrato, Rodríguez estima que “está lleno de fallos”, porque “deja la puerta abierta al recorte de personal”. En él “no se habla del capítulo de gastos para el personal de Psicología. Actualmente hay una psicóloga y no aparecen gastos de personal en ese pliego para cubrir esta plaza, además de que hay cuatro personas de Trabajo Social y con la cantidad económica que se dota se cubriría únicamente tres plazas”.
Además, Rosa del Mar ha informado de que el pliego de condiciones del contrato no reseña “la coordinación de los auxiliares, mientras que se han dejado los gastos de cocina en el aire. Nos da la impresión de que la alimentación de las personas sin techo sería alimentadas en el albergue con el servicio de una empresa de catering, por lo que dejarían de trabajar varias personas en los fogones del albergue”, donde actualmente acuden 39 personas a trabajar. “En este momento hay 39 malagueños y malagueñas que no saben si van a tener trabajo en las próximas semanas”, ha resumido la responsable socialista.
Por eso, pide la subrogación total, “con todos sus derechos”, en caso de que el contrato salga adelante. “Pedimos que conserven todos sus derechos, no sólo antigüedad sino también salario, horarios y plazas” en este centro de corta estancia. “De lo que se trata es de realizar un trabajo completo con las personas que no tienen nada, desde su alimentación, que vigilen su descanso, atención psicológica y acompañamiento hacia su inserción laboral. Esto lleva meses de trabajo para los que son necesarios los profesionales que hasta el momento han realizado una labor impecable”, ha insistido Rosa del Mar Rodríguez.
Por su parte, la concejala socialista Carmen Martín ha comparado “el desmantelamiento del servicio del albergue municipal con la eliminación de la única escuela infantil municipal que había en Málaga, la antigua Gota de Leche, a la que Paco de la Torre echó el cierre hace algunos meses” en el distrito Centro, “pese a las promesas del alcalde, que dijo que no la cerraría”. Por eso, Martín entiende “la preocupación de los trabajadores y trabajadoras del Centro de Acogida Municipal. “No nos creemos las promesas del PP y ya vemos que su política social pasa por privatizar todo servicio público que funciona”, ha manifestado en una clara referencia a la sanidad y a la educación.
Además, la edil del PSOE se ha mostrado especialmente preocupada por la pérdida de derechos laborales de la plantilla que hasta ahora trabaja en el albergue municipal. “Es obvio que van a perder poder adquisitivo los empleados públicos de este centro y lo más grave es que los trabajadores de la contrata de la empresa privada que prestan allí su servicio se pueden quedar en la calle, a no ser que el Ayuntamiento tenga la voluntad de darle una solución”. Aun así, Martín afirma que “estaremos especialmente vigilantes con este movimiento de Paco de la Torre en el albergue. No vamos a permitir bajadas de sueldo ni despidos. Al menos, no con nuestro voto y siempre daremos la batalla, como socialistas, por los derechos de los trabajadores y trabajadoras”.
Las trabajadoras del centro coinciden en la indignación que sienten, porque “están jugando con nuestros puestos de trabajo”. Como es el caso de Leonor Soria, ayudante de cocina, que explica la incertidumbre que viven cada día: “Somos personas humanas, trabajadoras, madres y padres familia y necesitamos saber qué va a pasar mañana, porque este trabajo es lo que tenemos para vivir”. Lo mismo opina la psicóloga del albergue, María José Jurado, que explica que “su pesadilla” comenzó el 15 de agosto y “nadie se ha dignado a darnos una explicación”. “Nosotros le brindamos al usuario una atención integral, con las tres patas de lo que es la salud, porque la salud es el estado de bienestar físico, mental y social, y ahora con el nuevo modelo de gestión esto se va a quedar tambaleando”, ha añadido.
Por último, Rosa Morales, trabajadora del servicio de limpieza, ha destacado la labor esencial que se realiza desde el albergue municipal: “El usuario no tiene la culpa de lo que pasa por detrás. Cuando ha ocurrido esto de la DANA, el centro abrió sus puertas y acogimos a 100 personas, aparte de a nuestros propios usuarios, la cocina hizo un menú para 400 personas. No puede ser que dentro de tres meses esto esté cerrado. Nosotros miramos la esencia de las personas, cosa que este Ayuntamiento no está haciendo”.
