La portavoz del grupo municipal Con Málaga, la confluencia de Izquierda Unida, Podemos, Verdes Equo, Más País, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz, Toni Morillas, exige al alcalde, Francisco de la Torre (PP), mediante una moción ante la comisión plenaria de Economía, que “supere la decisión de dedicar a los presupuestos participativos las migajas del 0.1% de un presupuesto municipal de 1.085 millones y destine, al menos, el 5% del presupuesto de inversiones, para poder contar con un participación vecinal real”.
Morillas considera que “los presupuestos participativos anunciados por el equipo de gobierno son el enésimo postureo de un PP que no se cree la participación vecinal. Dedicar 1.2 millones de un presupuesto de 1.085 millones no es participación real, ni relevante, ni significativa. Los presupuestos participativos tienen que ser una herramienta poderosa que brinde a la ciudanía la oportunidad de participar de forma directa y significativa para intervenir y transformar en la ciudad. Y han de permitir decidir sobre vivienda, juventud, derechos sociales o sostenibilidad, sobre todas las áreas vitales, las que generan más interés ciudadano”.
“La mejor vacuna frente a la desafección política y la corrupción es poner en marcha procesos de participación directa en los que la ciudadanía tenga la posibilidad de acceder a toda la información de la política municipal y participar de manera directa. Por eso queremos una participación real, más democrática, transparente e inclusiva.
Pero el presupuesto participativo del PP es una cáscara hueca, ya ha dejado claro que no le gusta incorporar la capacidad de decisión de la ciudadanía en la política vecinal: se negaron a una consulta sobre la iniciativa de un bosque urbano en los terrenos de Repsol, sobre la construcción de un rascacielos en el Puerto de Málaga o sobre el destino de los terrenos de los antiguos cines Astoria y Victoria”, incide Morillas.
La portavoz de Con Málaga también achaca al equipo de gobierno que “no haya normas, ni sabemos quién va a poder votar, dónde se van a tomar las decisiones o cuál es la distribución concreta que se hace del presupuesto por distritos. El proceso adolece de los mínimos criterios de calidad democrática. Y, en una ciudad que se autodenomina smartcity, no hay herramientas de participación digital para hacer más accesible la participación, como sí ocurre en otras ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia”.
De la Torre es un gran maquillador
El portavoz adjunto de Con Málaga, Nico Sguiglia, explica que “frente a la concepción aristocrática y oligárquica del PP, que entiende que la ciudadanía sólo tiene que pronunciarse en las urnas cada cuatro años, promovemos una ciudad democrática, con una ciudadanía activa y participativa, que pueda diseñar, decidir y hacer un seguimiento de la política municipal”.
Sguiglia asegura que “con más participación tendríamos una Málaga más justa y democrática. pero el PP prefiere almorzar y cenar en mesas de lujo e invitarnos a la ciudadanía a las migajas que se les caen del mantel, que en este caso es el 0.1% del presupuesto, la cantidad que van a dedicar a los presupuestos participativos”.
“De la Torre es un gran maquillador, pero nosotros insistimos en hacer posible una participación real, con determinación y mecanismos de decisión en favor de los barrios y los distritos, por eso los presupuestos participativos tienen que contar con un mínimo del 5% del presupuesto municipal de inversiones”, añade Sguiglia.
En la comparecencia pública para la presentación de la iniciativa Morillas y Sguiglia han estado acompañados por algunos de los representantes de Con Málaga en las juntas municipales de distrito.