Y pide al Ministerio criterios técnicos para valorar el uso de la mascarilla
La consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Catalina García, ha participado en el pleno extraordinario del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud que convocó de manera telemática la ministra de Sanidad, Mónica García, el pasado 4 de enero, con el objetivo de unificar criterios entre las comunidades autónomas ante los picos de virus respiratorios.
En este sentido, ha trasladado su desacuerdo ante la convocatoria de este Consejo Interterritorial, puesto que, a su juicio, estas decisiones deben tomarse en primer lugar en la Ponencia de Alertas y en la Comisión de Salud Pública donde se elabore un documento donde se establezcan niveles de alertas, indicadores, etc., para posteriormente ser avalado o no en el Consejo Interterritorial.
Por ello, ha solicitado que esos criterios técnicos adoptados en la Ponencia de Alertas y en la Comisión de Salud Pública estén disponibles previamente al Consejo Interterritorial para valorar el uso de la mascarilla y el resto de las medidas. Por este motivo, Andalucía ha votado en contra del documento propuesto del que ha tenido conocimiento una vez comenzado el pleno extraordinario por el Ministerio «al carecer de rigor técnico».
Así, ha incidido en la recomendación de la mascarilla en los centros sanitarios y sociosanitarios tras la evaluación continua de la situación epidemiológica en Andalucía por parte de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica.
Asimismo, Catalina García ha incidido en lo beneficioso de esta medida para todos los grupos vulnerables, que ya demostró ser una valiosa herramienta durante la pandemia, y para los ciudadanos que cursen síntomas de virus respiratorios, como tos o estornudos. Así, también ha hecho hincapié en la recomendación del uso de la mascarilla en lugares de concentración de personas, como en el transporte público, o en farmacias.
Del mismo modo ha subrayado que Andalucía publicó el pasado 13 de julio una instrucción sobre el uso de las mascarillas en los centros sanitarios y sociosanitarios, en el que se obligaba a la utilización de ésta en las áreas de mayor vulnerabilidad como UCI u Oncohematología.
Igualmente, reflejaba que cada centro sanitario tendrá la potestad, a través de los Servicios de Medicina Preventiva y Riesgos Laborales, de imponer el uso obligatorio de la mascarilla en el caso de mayor incidencia en esa área de gestión tanto para pacientes como profesionales de la Salud.
Al respecto, ha remarcado que desde octubre está en marcha el Plan de Alta Frecuentación, que se traduce en planes de contingencia que conllevan la ampliación de los recursos materiales y de plantilla ante un aumento de la demanda. Este Plan, ha destacado la consejera, está dando resultado evitando situaciones de tensión asistencial gracias a la monitorización diaria de los centros hospitalarios y al trabajo de los profesionales de la Salud «a los que agradece su trabajo».
Actualmente, la tasa de incidencia de Infecciones Respiratorias Agudas en Andalucía es de 505,2 casos por cada 100.000 habitantes, continuando la tendencia ascendente iniciada hace seis semanas. Una cifra que casi se duplica a nivel nacional, donde de media se registran 952,9 casos por cada 100.000 habitantes.
Vacunación gripe y Covid-19
Además, ha invitado a estos colectivos –mayores de 60 años, población con patologías crónicas, embarazadas, niños de 6 a 59 meses, personal sanitario y sociosanitario, entre otros– a vacunarse para protegerse frente a la gripe y a la Covid-19. Al respecto, ha recordado que todos los jueves, hasta el final de la campaña 2023-2024, los andaluces podrán acudir sin cita a los diferentes puntos de vacunación. Hasta hoy, 1.659.000 personas ya se han vacunado contra la gripe y 1.060.000 personas frente a la Covid-19. Con una cobertura del 55% en gripe y del 40% en Covid-19 en mayores de 60 años y un 41% de cobertura antigripal infantil.
En este punto, ha hecho hincapié en la importancia de que los grupos vulnerables renueven en cada campaña la vacunación tanto de la gripe como de la Covid-19, puesto que cada año se adaptan las dosis a las variantes que circulan en el territorio.
Por otro lado, la titular de Salud y Consumo ha vuelto a pedir a la ministra de Sanidad un pleno extraordinario para tratar el déficit de profesionales médicos en el Sistema Nacional de Salud, sobre todo, en Atención Primaria. Una falta de facultativos que ha calificado de endémico y para el que urge poner medidas contundentes encima de la mesa. «Los sistemas de salud de las comunidades autónomas están tensionados debido a la carencia de médicos. Es necesario que, de forma urgente, se convoque un Consejo Interterritorial para abordar este asunto«, ha añadido.
Al respecto, ha recordado que la mayoría de las comunidades autónomas han reclamado al Gobierno de España desde hace cinco años un plan de choque para que, por un lado, haga más atractiva las plazas que ahora tienen más dificultad para ocupar y, por otro, una oferta extraordinaria de plazas MIR (1.000 anuales durante los próximos cuatro años) que incida en las áreas de Medicina Familiar y Pediatría en Atención Primaria.
Sobre esto último, Catalina García ha vuelto a reclamar un Pacto Nacional por la Salud, «que es hoy más necesario que nunca», ha dicho, para tratar entre otros temas, esta falta de profesionales médicos, pero, también, las desigualdades que existen en la financiación entre comunidades autónomas.
«Las comunidades autónomas necesitamos un espacio en el que, junto al Ministerio de Sanidad, se aborden de manera serena los problemas que afectan al país. Un espacio de diálogo y acuerdo centrado en los problemas de los españoles y alejado por completo de cualquier ideología», ha señalado. Igualmente, ha pedido colaboración al Ministerio de Sanidad para el impulso coordinado de campañas informativas sobre vacunación, prevención y promoción de la salud.
Por último, ha remarcado la necesidad de que el Ministerio de Sanidad modifique o flexibilice los criterios para poder acreditar más unidades docentes. «Andalucía ya no puede ofertar más plazas en áreas tan comprometidas hoy como son Medicina Familiar, Neurología o Psiquiatría. Queremos ofertar más plazas, pero si el Ministerio no introduce un cambio en los criterios, será imposible», ha concluido.