El Grupo Municipal Socialista vuelve a exigir al Ayuntamiento la paralización de la construcción de una gasolinera a menos de 50 metros de 250 viviendas de la barriada Los Rosales y de otras 200 en Los Jazmines, en el distrito de Churriana. “No estamos en contra de las gasolineras, estamos en contra de que se instalen en núcleos urbanos consolidados, como en este caso que afectará a más de 500 vecinos y vecinas”, ha manifestado el concejal socialista Salvador Trujillo.
Durante una jornada informativa en el distrito, Trujillo ha recibido las quejas de un centenar de vecinos que se han concentrado en la calle Escritora Carmen Bravo-Villasante, junto a una zona residencial donde viven más de mil personas, para pedir que se dé marcha atrás a este proyecto.
“Tras dos años paralizado, el equipo de gobierno del Partido Popular prometió en campaña electoral que no se iba a realizar y ahora, tres meses después, vemos cómo la apisonadora de la mayoría absoluta va a aprobar ese Plan Especial de instalación de la gasolinera en la Comisión de Ordenación del Territorio y Urbanismo del próximo lunes”, ha denunciado el socialista.
La construcción de esta estación de suministro de carburante perjudicará la salud y el bienestar de los residentes en la zona, especialmente de los más vulnerables. Como ha explicado Salvador Trujillo, responsable del PSOE en Churriana, “el riesgo cero no existe cuando se manipula carburante”, por lo que “se condenará a mayores y niños a respirar benceno y sustancias contaminantes”. Además, ha añadido que “al tratarse de una gasolinera low cost, sin operarios, tampoco contribuye a la creación de empleo, solo genera inconvenientes”.
El edil socialista ha explicado que “la problemática que genera esta gasolinera en los más de 500 vecinos de Los Rosales y Los Jazmines es de todo tipo: medioambiental, de ruido y de movilidad. Desde el grupo socialista vamos a estar siempre del lado de los churrianeros y churrianeras, por lo que estaremos apoyando las acciones reivindicativas que tomen los vecinos contra dicho proyecto”.
En este sentido, Ana Martín, en representación de los vecinos y vecinas de Los Rosales y Los Jazmines, ha manifestado que está “totalmente en contra de que pongan una gasolinera en el núcleo urbano que nos afecta a los vecinos de ambas barriadas, porque conlleva unos problemas tremendos de contaminación y de ruido”. En su caso personal, son escasos metros los que separan el hogar de la estación de suministro de carburante: “Son diez pasos los que hay desde mi casa a la gasolinera y eso es inhumano”, ha sentenciado.
No es la primera vez que este Ayuntamiento permite instalar una gasolinera a escasos metros de cientos de viviendas y sin contar con la opinión de los residentes. Casos similares son los de la gasolinera en Camino de Coín, en el mismo distrito de Churriana, o la gasolinera low cost en La Pelusa del distrito Este.