El Ayuntamiento de Cartajima ha finalizado el proyecto de mejora de cubiertas del Colegio Público Rural Alto Genal, actuación con la que se pretende contribuir a mantener las instalaciones en óptimas condiciones, garantizando su buen estado durante los próximos años y evitando que se produzcan filtraciones y humedades que pudieran afectar al interior de los inmuebles.
Los trabajos han consistido en la retirada del material dañado de las cubiertas para la posterior impermeabilización de las mismas mediante tela asfáltica y espuma aislante. El proceso ha concluido con la colocación de nuevas tejas. Desde el Consistorio se ha explicado que esta actuación se ha llevado a cabo tanto en la cubierta de los dos edificios que componen el colegio del municipio como en el inmueble en el que se sitúa el Punto Joven, donde acuden regularmente vecinos y vecinas de Cartajima para participar en diferentes actividades.
El proyecto se inició a finales de julio y ha contado con un presupuesto de alrededor de 50.000 euros financiado a través de fondos procedentes de la Diputación Provincial de Málaga.
Por otro lado, hace unos días ha dado comienzo con normalidad el curso escolar en Cartajima. Se da la circunstancia de que el colegio de Cartajima forma parte del CPR Alto Genal, cuya sede administrativa se encuentra situada en Parauta, y que está dividido en seis centros educativos radicados en Alpandeire, Faraján, Júzcar, Cartajima, Pujerra y el propio municipio de Parauta.
El colegio ha iniciado esta semana el curso 2013/2024 con 59 alumnos, 10 menos que el año pasado, un descenso producido por dos factores principales: la despoblación rural y la finalización de la etapa de primaria de un buen número de alumnos que, en su mayoría, continúan con la educación secundaria en Ronda.
El centro de Parauta cuenta este curso con 15 alumnos matriculados, hay 13 en Alpandeire, 10 en Faraján, 9 en Pujerra, 7 en Cartajima y 5 en Júzcar. Según ha explicado José Antonio Sánchez Bernal, director del CPR Alto Genal, para que desdoblen las unidades permitiendo crear dos grupos en cada pueblo, uno de infantil y otro de primaria, es necesario llegar a un mínimo de 13 alumnos por centro según las instrucciones establecidas por la Consejería de Educación.
Por tanto, el descenso en el número de alumnos también ha provocado que el equipo docente del colegio se haya visto reducido a 14 maestros, 3 menos que el curso pasado. Una de las principales particularidades de los colegios rurales es la itinerancia de los maestros, que deben desplazarse de municipio a municipio para dar clase a los alumnos.
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Cartajima se ha adelantado que en próximas fechas se plantea la posibilidad de implementar diferentes medidas que contribuyan a asentar la población y a atraer personas al municipio, especialmente familias con hijos en edad escolar.