El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha asistido en el Palacio de San Telmo a la firma de un Protocolo de colaboración entre la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y la Consejería de Salud y Consumo que servirá para atender mejor en sus centros educativos y de forma continuada a niños y jóvenes que padecen enfermedades crónicas complejas o que están en situación de cuidados paliativos.
Moreno ha incidido en que así se hace realidad un compromiso del Gobierno andaluz y ha querido agradecer el esfuerzo colectivo que se ha realizado y el trabajo e implicación de las familias. «Esto es una buena noticia, una esperanza y un derecho más. Esperamos seguir avanzando, consiguiendo mayores cotas para esas familias, esos niños y para todos esos jóvenes», ha agregado.
El objetivo es el de dar un entorno de seguridad y facilitar una escolarización adaptada, algo que es clave, ya que la escuela es un medio de normalización, participación y convivencia básico para su desarrollo, además de ser un lugar para la felicidad y la integración de los menores.
Este acuerdo, rubricado por las consejeras Patricia del Pozo y Catalina García, tiene una especial relevancia porque tal como se viene observando entre el alumnado escolarizado, existen niñas y niños que padecen enfermedades con cronicidad complejas o que atraviesan situación de cuidados paliativos que, pudiendo acudir de forma puntual o permanente al centro educativo, requieren mantener un plan terapéutico y de cuidados, incluidos cuidados continuados sanitarios durante el horario escolar.
Este Protocolo de colaboración para la coordinación de la intervención en determinadas necesidades del alumnado relacionadas con la salud en los centros docentes sostenidos con fondos públicos de la comunidad autónoma de Andalucía recoge indicaciones para elaborar planes individualizados que garantizan la escolarización segura e incluye la actuación ante posibles casos de emergencia y asegura un sistema de comunicación rápida y fluida que ofrezca una respuesta ante situaciones de este tipo.
Asimismo, prevé el asesoramiento por parte de los responsables de salud, a los alumnos, padres y madres y al profesorado sobre las medidas y pautas sanitarias a seguir. Todo ello con el fin de dar una escolarización adaptada y más eficaz en la atención de los niños, los jóvenes y sus familias.
Ambas consejerías cuentan ya con actuaciones, medidas, planes y programas para la atención del alumnado en lo relacionado con la promoción y la atención a la salud entre los que se encuentran el Plan Integral de Obesidad Infantil, el Plan Integral de Salud Mental, el Plan Integral de Diabetes, los programas de hábitos de vida saludable o la atención domiciliaria y hospitalaria.
Con todo ello el Gobierno andaluz quiere acercarse a todas las realidades que viven los niños andaluces en materia de sanidad en los distintos centros educativos andaluces.
En toda esta labor las Enfermeras Referentes de Centros Educativos tienen un papel clave y son una figura fundamental de coordinación entre el sistema de salud y los centros, un colectivo que el curso pasado estuvo formado por 411 profesionales que atendieron a 678 menores.
Con este Protocolo se da un paso adelante en el refuerzo a la atención de estudiantes en sus propios centros y en la consolidación de las escuelas e institutos como entornos seguros, inclusivos y mejores para el desarrollo de los niños y jóvenes.