El Movimiento de Pensionistas ha puesto fin a su semana de movilizaciones con una gran manifestación en Bilbao en la que han advertido que seguirán con la «lucha» hasta que, entre otras cuestiones, se garanticen pensiones mínimas de 1.080 euros, cuestión en la que también han interpelado a los Gobiernos de Euskadi y Navarra.
Los pensionistas han desarrollado, entre otras iniciativas, un encierro-ayuno en un local de Bilbao para reclamar pensiones «públicas, dignas, justas, suficientes y de 1.080 euros». En la movilización de este sábado, tras una pancarta en la que se podía leer el lema ‘Recortes de pensiones no-1.080 pensión mínima, se han proferido gritos en favor de las pensiones públicas, contra la brecha salarial y se ha advertido al lehendakari, Iñigo Urkullu, que los pensionistas siguen «en lucha».
Con el apoyo de pensionistas de toda Euskadi y de diversos puntos del Estado, portavoces del Movimiento han recordado que este sábado también se desarrolla en Pamplona una movilización en defensa de la sanidad pública, «otra de las preocupaciones del colectivo».
«Venimos a mostrar que para nosotros no solo son importantes las pensiones de hoy en día sino que también las del futuro. Por eso entendemos justificable que sindicatos y organismos sociales se sumen», han sostenido al inicio de la manifestación.
Tras reivindicar que una pensión mínima de 1.080 euros en 14 pagas es «un ingreso básico para que un pensionista pueda acceder a una vida digna en su vejez», han asegurado que ello es también «responsabilidad de los gobiernos e instituciones vascas y navarras». Asimismo, han censurado que «reforma tras reforma» ven cómo se reducen sus pensiones de tal forma que pese a la subida del 8,5%, un total de 167.943 pensionistas en Euskadi y 51.358 en Navarra cobran menos de 1.080 euros.