El Colegio de Enfermería de Málaga quiere denunciar los fuertes contrastes de rendimientos económicos y reconocimientos profesionales que existen entre los puestos de trabajo de Enfermería de las diferentes Comunidades Autónomas de nuestro país. Cada vez es mayor el número de profesionales de la Enfermería recién egresados en Andalucía que año tras año deciden dejar su lugar de nacimiento para poder desarrollar su labor con dignidad y condiciones justas.
Para José Miguel Carrasco, presidente del Colegio de Enfermería de Málaga, “no estamos hablando de una fuga, sino de una pérdida de talento que viene directamente motivada por una oferta de contrataciones precarias y volubles que desde hace mucho ofrece el sistema sanitario público de Andalucía. Una pérdida de la que se benefician otros sistemas sanitarios, invirtiendo en atención y cuidado a la ciudadanía, sin haber tenido que destinar ni una mínima parte de sus fondos presupuestarios a la reputada formación con el que cuenta nuestro país”.
Una lacra del sistema de salud…
La sobrecarga laboral y la falta de profesionales sanitarios es un problema al que la profesión viene plantando cara desde hace décadas. Sin embargo, el Colegio Oficial de Enfermería de Málaga ha percibido como la crisis sanitaria del COVID-19 y el incremento en las necesidades de salud de la población, ha propiciado un crecimiento de la problemática del sustancial déficit de enfermeras que mantiene Andalucía.
En definitiva, nos encontramos ante un problema estructural histórico en el déficit de profesionales de la Enfermería que deriva en la insuficiencia e incapacitación para garantizar la calidad asistencial en nuestro sistema de salud.
… con solución
Desde el Colegio Oficial de Enfermería de Málaga creemos, de manera rotunda, que es posible evitar esta situación. Como ha explicado el presidente de las enfermeras colegiadas malagueñas, “la solución requiere de una intervención inmediata para dejar de desaprovechar el talento y comenzar a invertir de verdad en profesionales de la salud, cuidando las condiciones laborales y cultivando esa necesaria respuesta a las necesidades asistenciales de la población”.
Para ello, por supuesto, se requiere una respuesta coordinada y conjunta de actuación por parte de todas las comunidades autónomas que permita implementar medidas, ayudas e incentivos para avanzar hacia este objetivo; que disipe el actual contraste que existe entre los distintos sistemas de salud, que suprima el actual sistema de acreditación farragoso de Andalucía, que posibilite una mejor sanidad, más fuerte, consolidada y estable.
