El senador Carles Mulet, miembro de la ‘Asociación Parlamentaria en Defensa de los Derechos de los Animales’ (APDDA), ha solicitado al Gobierno, a través de pregunta escrita, la prohibición expresa en Espala de importaciones de carne, pieles y cualquier otro producto derivado de la caza del canguro.
Según denuncia Mulet, en Australia se matan al menos 1,6 millones de canguros al año con fines comerciales, empleando métodos que ocasionan problemas de higiene y riesgos para la seguridad alimentaria, incluida la posible contaminación de la carne con bacterias, debido a que los animales se sacrifican en zonas del interior del país y sus cadáveres se transportan largas distancias al aire libre sin refrigerar. Por ello, toda importación de carne de canguros para consumo humano representa un riesgo para la salud de los consumidores españoles.
Asimismo, se calcula que aproximadamente 400.000 crías de canguros pierden la vida como consecuencia de la muerte de sus madres.