El gobierno de Rusia advirtió que la crisis energética en la Unión Europea (UE) será «peor cuando haga frío» y responsabilizó por ello a las sanciones aplicadas al país en respuesta a la invasión a Ucrania. Esa postura fue compartida por el líder de ultraderecha de Italia Matteo Salvini, a la vez que el primer ministro de Ucrania buscaba apoyo en su visita a Alemania y Moscú permitió la llegada de periodistas a la planta nuclear de Zaporiyia.
Es «totalmente absurda» la decisión de suspender el mantenimiento de los equipos pertenecientes al gigante gasístico ruso Gazprom, afirmó el vocero de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, informaron el canal local Rossiya y la agencia de noticias rusa Sputnik.
«Es culpa de aquellos políticos que tomaron la decisión sobre las sanciones, son estos desafortunados políticos los que abocan a sus conciudadanos a morirse de un ictus al ver la factura de la luz, y la situación irá a peor cuando haga frío», sostuvo.
La declaración de Peskov sobre la ineficacia de las sanciones fue compartida por el exviceprimer ministro italiano Salvini, quien dijo que «pasaron varios meses y la gente paga las facturas el doble, o el cuádruple», mientras «la guerra continúa y las arcas de Rusia se llenan de dinero», según la radio italiana RTL y la agencia AFP. «¿Las sanciones funcionan? No; al día de hoy los que fueron sancionados ganan, mientras los que impusieron las sanciones están de rodillas», tuiteó Salvini, quien pidió «repensar la estrategia».