El grupo municipal de Unidas Podemos por Málaga (UPporMálaga) promoverá en el
próximo Pleno que el Ayuntamiento de Málaga “inste al Gobierno de España y a la SAREB
para que todos los activos inmobiliarios e inmuebles que disponga la entidad en Málaga pasen a gestionarse desde el propio Consistorio para poner en marcha políticas que garanticen el derecho a una vivienda digna para las miles de familias malagueñas demandantes”.
El concejal portavoz adjunto de Unidas Podemos, Nico Sguiglia, explica que “durante la crisis financiera de 2008 se tomaron algunas decisiones nefastas, una de ellas fue la creación de la SAREB, conocida popularmente como el banco malo, una sociedad de reestructuración de créditos y de activos que absorbió los llamados activos tóxicos de muchas entidades financieras privadas. De esta forma numerosos pisos, suelos y créditos pasaron a formar parte de esta entidad que fue pagada con decenas de millones de euros de dinero público”.
Sguiglia informa de que “la participación del sector público en la SAREB ya supera el 50%, por lo que se trata de una entidad pública. Por lo tanto, pedimos que se conozcan todos los activos inmobiliarios que están en manos de esta entidad en la ciudad de Málaga y que se utilicen para poner en marcha políticas de vivienda. Los pisos y activos que están en manos de esta entidad pública tienen que usarse para garantizar el derecho a la vivienda en la ciudad”.
“Un caso reciente de la utilidad de nuestra propuesta es el viviendo durante los intentos de
desahucio en la barriada de Santa Julia. La única respuesta del Ayuntamiento ha sido ofrecer una ayuda a la vivienda, un recurso que no es operativo, porque no se encuentran pisos en el mercado local que puedan abonarse con esas ayudas. Lo mínimo que pedimos es que los activos inmobiliario de la SAREB sirvan para satisfacer el derecho a la vivienda. Si lo hemos pagado entre todos, tiene que revertir y repercutir en la mejora de la vida de la ciudadanía”.
La concejala de Unidas Podemos, Remedios Ramos, resalta “la crisis en materia de vivienda que sufre Málaga, con unos precios de alquiler y venta cada vez más altos y unas hipotecas leoninas que cada vez suponen un mayor esfuerzo financiero para las economías de las familias malagueñas”.