El Grupo Municipal Socialista se ha aliado con la asociación Abanico Solidario para frenar que 200 familias de la barriada de Santa Julia, en el distrito de Cruz de Humilladero, “sean expulsadas de sus viviendas en alquiler con el mismo modus operandi que se sigue en Callejones del Perchel”. La responsable socialista de Vivienda, Alicia Murillo, ha señalado que “estas casas acogen a familias desde hace cinco décadas con renta antigua y que pagan la comunidad, pero no hay mantenimiento y las viviendas tienen una importante degradación”. Para la socialista, “esta dejadez en las casas, además de subirles el precio del arrendamiento de la noche a la mañana, es la forma que tiene la promotora para echarlos, una práctica que estamos viendo ya en muchos barrios”.
Alicia Murillo ha pedido al equipo de gobierno local “que actúe ya, que ayude a los vecinos y les asesore ante esta despersonalización de los barrios de Málaga, que expulsa a sus residentes de toda la vida mientras Paco de la Torre pretende implantar un modelo de ciudad que no vela por la calidad de vida de los malagueños”. Así lo ha manifestado Murillo tras una reunión con representantes de los residentes en Santa Julia, en compañía de los ediles Mariano Ruiz, responsable de Urbanismo en el PSOE, y Pablo Orellana, responsable del distrito de Cruz de Humilladero, además de Francisco Álvarez, presidente de la asociación Abanico Solidario.
El primer paso dado por los vecinos ha sido la creación de la plataforma Santa Julia no se vende con el asesoramiento de Abanico Solidario. Murillo ha insistido en que “estas familias están desasistidas por el Ayuntamiento, no saben cómo acudir a él y necesitan asesoramiento, necesitan una administración que les defienda a ellos y no a los grandes fondos de inversión o grandes tenedores de vivienda como es este el caso. Frente a la especulación con la vivienda, los socialistas defendemos barrios llenos de malagueños. Que ninguno de nuestros ciudadanos se vea obligado a marcharse a otro municipio por el precio del alquiler. Estamos en contra de estos métodos para expulsarles, el de subir de la noche a la mañana hasta un 30 por ciento el precio del arrendamiento y dejar de mantener el edificio hasta su total degradación”.
El edil Mariano Ruiz, responsable de Urbanismo en el grupo socialista, ha criticado que “el modelo especulativo y de pelotazo urbanístico de Paco de la Torre se siente en cada uno de los rincones de nuestra ciudad. Ayer, en el Perchel, hoy en Santa Julia”. Ruiz ha denunciado que “a la forma de expulsar a los vecinos de sus casas con el método de asusta viejas se suma ahora la dejadez en el mantenimiento de los edificios. Las casas sufren una gran degradación, pese a que los residentes pagan la comunidad para afrontar mejoras, y así se les obliga a abandonar el edificio para alquilar las casas a precios más altos.
Málaga se está convirtiendo en una ciudad donde las familias más humildes no podrán vivir”, se ha lamentado el socialista. “Defenderemos a los vecinos de Santa Julia ante este interés por hacer caja con sus casas. Santa Julia no se vende”, ha zanjado por su parte Ruiz. El edil Pablo Orellana, responsable del distrito por el PSOE, ha coincidido en “la despersonalización de los barrios que está creando el PP sin atender las demandas de vecinos a los que se les empuja a abandonar sus barrios”.
El presidente de Abanico Solidario, Francisco Álvarez, explicó a los vecinos de Santa Julia los pasos a seguir “para combatir esta fiebre por echar a los malagueños de los barrios”. El primer ha sido la creación de una plataforma que coordine esfuerzos en la misma dirección.
“La unión hace la fuerza. No sólo vamos a pelear para que estos vecinos no se vayan de sus casas. También para que de una vez por todas se acometan mejores en las zonas comunes y en los domicilios, porque muchos tienen cañerías al aire, agujeros por las que entran ratas en los hogares, tienen acusadas humedades en techos y paredes porque hay que reparar los bajantes”, ha declarado Álvarez. “ante estas condiciones infrahumanas, el Ayuntamiento está obligado a mediar entre los vecinos, la comunidad de propietarios y el tenedor de las viviendas”.
El líder social ha denunciado que “a varias familias se les ha cambiado el contrato de la noche a la mañana, de tener una renta antigua de 300 euros hasta 550 euros cuando se les concede una ayuda del IMV. En el momento en que ya no pueden disfrutar de la ayuda municipal, el alquiler continúa a 550 euros, un dinero que no pueden desembolsar estas familias luego se les empuja a irse de la casa. Esto es indignante”, ha aseverado Francisco Álvarez, que ha desvelado que “en algún caso, el tenedor de la vivienda le ha ofrecido pagar 50.000 euros para quedarse con la casa”.
Coordinación para la ayuda humanitaria a Ucrania
En otro orden de cosas, el portavoz socialista en la Diputación de Málaga, José Bernal, ha solicitado al equipo de gobierno en la institución que coordine la ayuda humanitaria de los ayuntamientos de la provincia a Ucrania. Bernal ha atendido hoy a los medios de comunicación en Alhaurín de la Torre, donde el grupo socialista en la Diputación ha celebrado una reunión.
Bernal ha solicitado al presidente de la Diputación, Francisco Salado, que convoque a alcaldes y alcaldesas de la provincia para coordinar la ayuda humanitaria a Ucrania de los pueblos de Málaga. «Nos trasladan muchos alcaldes y alcaldesas que tienen problemas con respecto a la canalización de la ayuda humanitaria a Ucrania. Hay una ola de solidaridad grandísima en la provincia de Málaga, los vecinos y vecinas quieren ayudar al pueblo de Ucrania. Por eso, le pedimos a la Diputación que reúna a los alcaldes para canalizar esa ayuda humanitaria», ha expuesto.
Asimismo, Bernal ha considerado que es la Diputación de Málaga la que tiene que coordinar la puesta a disposición de instalaciones por parte de los ayuntamientos para la acogida de las personas ucranianas que sufren las consecuencias de la invasión rusa. «Solicitamos a la Diputación de Málaga que lidere la coordinación de la ayuda humanitaria a Ucrania en la provincia de Málaga», ha dicho.