La Atrofia Vaginal o síndrome vulvovaginal de la menopausia se presenta ya como el mayor problema de salud íntima en las mujeres de Málaga de más de 60 años. Así lo corroboran los estudios del Centro Salud Íntima de la Mujer que estima que el 50% de las mujeres mayores de 60 años sufren algún tipo de síntoma, más de 105.000 en la provincia de Málaga y unas 450.000 en Andalucía.
«La atrofia vaginal origina sensaciones de irritación, cierta quemazón e incluso dispaurenia, dolor intenso en las relaciones sexuales; algo que puede hacer aún más molesta una etapa marcada por la menopausia», comentó el doctor Pedro Torrecillas, director del Centro Salud Íntima de la Mujer.
Esta patología afecta principalmente a la actividad diaria y a las relaciones sexuales, produciéndose dolores intensos internos y sequedad que causan una gran pérdida de calidad de vida. Una dolencia que preocupa cada vez más al segmento de población femenino, en una etapa fundamental de su vida.
El
Centro Salud Íntima de la Mujer presenta, a través de sus especialistas, un método basado en la regeneración de colágeno mediante técnica láser de erbio Fotona y radiofrecuencia INDIBA en todos estos tejidos. Uno de los tratamientos más eficaces para detener y regenerar este tipo de patologías.
La atrofia puede llegar hasta reducir al mínimo el proceso de humidificación vaginal, hasta tal punto que puede provocar dificultad en las relaciones sexuales o riesgo de infección en la zona. Estas dolencias físicas también llevan a problemas como las infecciones urinarias o males psíquicos, como el estrés, la ansiedad o la depresión; al no verse con un control total sobre ciertas partes del organismo.
La acción del láser se basa en emitir un rayo de luz emitido a paredes vaginales, estimulando la producción de nuevas fibras de colágeno en la mucosa. La radiofrecuencia vaginal de INDIBA estimula la producción de colágeno en todas las estructuras internas, paredes vaginales, mucosa, epitelio e intersticio, hasta un espesor que puede llegar a los 10 ó 15 centímetros de profundidad. Los genitales femeninos recuperan su estructura original y la paciente recupera la sensación de bienestar.
Ambos tratamientos realizados con el láser Fotona y la radiofrecuencia INDIBA son indoloros y, en casi todos los casos, sin necesidad de anestesia o precauciones especiales antes y después de dichos tratamientos, por lo que la paciente se puede incorporar a sus hábitos cotidianos de forma inmediata.
La sequedad vaginal se manifiesta por la disminución de los fluidos generados en el aparato genital femenino. La secreción de fluidos proviene de las glándulas en el cuello del útero, la vagina o la vulva, modificándose la cantidad y la viscosidad de la mucosidad vaginal, debido a la pérdida en la producción de hormonas sexuales, fundamentalmente estrógenos.