Según un estudio realizado a casi 9.000 alumnos
Comer más frutas y verduras se asocia significativamente con una mejor salud mental en los niños de educación secundaria, mientras que desayunos y almuerzos nutritivos están relacionados con el bienestar emocional en los alumnos de todo tipo de edad.
Ésta es la conclusión de un nuevo estudio y el primero en investigar el vínculo entre la ingesta de frutas y verduras, las opciones de desayuno y almuerzo, y el bienestar mental en niños en edad escolar. El trabajo, publicado este martes en la revista ‘BMJ Nutrition Prevention & Health’, fue dirigido por la Universidad de Anglia del Este y el Consejo del Condado de Norfolk (Reino Unido).
«El bienestar mental deficiente es un problema importante para los jóvenes y es probable que tenga consecuencias negativas a largo plazo. Las presiones de las redes sociales y la cultura escolar moderna se han promocionado como razones potenciales para una creciente prevalencia de bajo bienestar mental en niños y jóvenes”, apunta Alisa Welch, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Anglia del Este.
Welch subraya, además: “Hay un creciente reconocimiento de la importancia de la salud mental y el bienestar en la vida temprana, sobre todo porque los problemas de salud mental de los adolescentes a menudo persisten en la edad adulta, lo que lleva a peores resultados y logros en la vida”.
No está claro si las elecciones dietéticas de los alumnos de la escuela podrían estar relacionadas con su salud mental. Para explorar esto más a fondo, los investigadores realizaron encuestas de más de 50 escuelas en Norfolk. En el análisis final se incluyeron datos de 8.823 alumnos (7.570 de secundaria y 1.253 de primaria).
Las preguntas dietéticas tenían como objetivo explorar la ingesta de frutas y verduras, así como el tipo de desayuno y almuerzo consumido, el consumo de alcohol, la disponibilidad de comidas escolares gratuitas y la satisfacción con el peso.
También se recopiló información general y de antecedentes de salud, así como otros factores, que van desde si tenían su propio dormitorio y cama hasta si se sentían seguros en la escuela y en casa, y si habían presenciado violencia o discusiones regulares en casa. La salud mental se evaluó utilizando medidas validadas apropiadas para la edad.
Resultados
Según Welch, sólo alrededor de una cuarta parte de los niños de secundaria y un 28% de los niños de primaria informaron haber comido las frutas y verduras recomendadas cinco al día, y poco menos de uno de cada 10 niños no comía frutas o verduras.
Welch añade que más de uno de cada cinco niños de secundaria y uno de cada 10 niños de primaria no desayunan. Y más de uno de cada 10 niños de secundaria no almorzaba.
Richard Hayhoe, también de la Facultad de Medicina la Universidad de Anglia del Este, apunta que «comer bien se asoció con un mejor bienestar mental en los niños». «Entre los niños de secundaria en particular, había un vínculo muy fuerte entre comer una dieta nutritiva, llena de frutas y verduras, y tener un mejor bienestar mental», indica.
Hayhoe añade: «También encontramos que los tipos de desayuno y almuerzo que comían los alumnos de primaria y secundaria también se asociaban significativamente con el bienestar. Los niños que comía un desayuno tradicional experimentaron un mejor bienestar que aquellos que solo tomen un refrigerio o una bebida. Pero los niños de secundaria que bebían bebidas energéticas para el desayuno tenían puntuaciones de bienestar mental particularmente bajos, incluso más bajos que para aquellos niños que no consumían ningún desayuno».