Ramos: “Hay que quitar basuras, vertidos y vegetación invasora, pero es esencial preservar la masa vegetal surgida de forma natural, por su valor ecológico y porque ante posibles avenidas e inundaciones contribuye a reducir los riesgos”
(Málaga 05 de septiembre de 2021) La confluencia de Podemos e Izquierda Unida alerta de que el desbroce salvaje del Guadalmedina, por parte de una empresa privada contratada por el equipo de gobierno del PP y Cs en el Ayuntamiento de Málaga, está causando graves daños en la flora autóctona y la avifauna del río que discurre por la ciudad.
La concejala viceportavoz de la coalición de izquierdas, Remedios Ramos, denuncia que “la actuación supone una auténtica barbaridad y, además del daño ambiental, también es muy contraproducente ante los posibles casos de avenidas, ya que el agua acabará fluyendo a mayor velocidad, arrastrando gran cantidad de sedimentos y aumentando los riesgos en caso de inundaciones, además de afectar al ecosistema fluvial que se había establecido de forma natural. Es una grave irresponsabilidad”.
“Nos hemos quedado estupefactas al comprobar el ataque que está sufriendo el Guadalmedina, sobre todo porque el río se ha venido renaturalizando de forma espontánea. Un avance que está quedando destruido ahora con la entrada sin criterio ambiental alguno de maquinaria pesada al río para que arrase con todo. Un entorno como el Guadalmedina requiere la planificación de un desbroce selectivo, sin atentar contra la masa vegetal que se ha generado, cuidando y mimando a nuestro río, y atendiendo siempre a criterios ecológicos”, razona Ramos.
La portavoz de la coalición de izquierdas incide en que la actuación “también supone un claro ataque a la avifauna. En el cauce se ven con facilidad garcillas, garcetas y garzas, anátidas (como el ánade real, que ha anidado en el cauce), pollas de agua y fochas, entre otras aves. Incluso se han podido observar dentro del cauce urbano especies raras de ver como la carraca, el martín pescador y el ibis morito, convirtiendo el espacio en un observatorio privilegiado de aves en pleno casco urbano. Además de aves, en sus aguas pueden encontrarse galápagos, ranas e incluso cangrejos de río (este último especie exótica, aunque sirve de alimento a parte de la avifauna).
“Demandamos que el Guadalmedina se limpie de basura y de todo tipo de vertidos. Igualmente pedimos el desbroce selectivo vegetación invasora y la tala puntual del arbolado que interfiera seriamente el paso del agua en caso de avenidas (como algunos eucaliptos y palmeras que han crecido en medio del cauce). Esta limpieza y desbroce selectivo debe realizarse sin el uso de maquinaria pesada, evitando la alteración del hábitat ya creado. Es fundamental ver cómo se está interviniendo en otras ciudades de Europa y España (independientemente del signo político, como Madrid, Valladolid, León, etc.), en las que los cauces urbanos se han renaturalizado, creando un entorno agradable para la ciudadanía y no una cañería a cielo abierto, como pretenden hacer con el Guadalmedina. Una vez más, el equipo de gobierno vuelve a equivocarse y a demostrar su nula sensibilidad y preocupación ambiental”, resalta Ramos.
La concejala portavoz de Unidas Podemos, Paqui Macías, recuerda que “el plan del alcalde y el PP para el Guadalmedina es más hormigón, con una actuación que llegan a cifrar en 120 millones de euros. El desbroce abusivo que está realizando deja claro el desprecio que le tienen a los valores naturales del río. Frente a este proyecto, nosotras apostamos por un río más verde y más vivo, a través de una actuación que tendría un coste económico mucho más bajo, para que Málaga gane en calidad de vida, ya que podríamos disfrutar de un río para pasear en bici o a pie y para realizar actividades saludables”.