Tonodesmus bolivari es una especie de milpiés tan sólo conocida de la Cueva del Hoyo de la Mina, una cueva que fue totalmente destruida por el avance de la cantera de la cementera de La Araña. En España esta especie no se conoce en ningún otro lugar por lo que puede considerarse actualmente como extinta.
No obstante, el hallazgo de la nueva cueva en La Araña abre nuevas esperanzas de que pueda albergar una población no conocida de esta especie de artrópodo en su interior, constituyendo un nuevo caso de “efecto Lázaro”, por el cual se redescubre una especie considerada extinta en el momento presente.
En Málaga ya existen casos registrados de efecto Lázaro, como es el caso de la planta Galatella malacitana, confundida con otra especie africana, Nolletia chrysocomoides, y que no se había vuelto a localizar desde el siglo XIX. En 2013 la casualidad permitió el descubrimiento de ejemplares de esta planta en varias sierras malagueñas, confirmando que se trataba de una especie nueva, no conocida para la Ciencia.
La destrucción de hábitats es una de las mayores causas de pérdida de biodiversidad a nivel mundial, y la principal causa en la provincia de Málaga, con más del 80% del litoral construido. Este efecto es especialmente grave en aquellos hábitats más vulnerables como ríos, playas, acantilados, manantiales o cuevas. La conservación de los hábitats, especialmente los más vulnerables, garantizan la conservación de la biodiversidad oculta, no conocida aún en nuestros días, permitiendo el redescubrimiento de especies consideradas extintas o el hallazgo de especies nuevas para la Ciencia. Sin embargo, la conservación de los hábitats no está garantizada por parte de las autoridades medioambientales como demuestra la extinción de Tonodesmus bolivari en España.
En 1923 el entomólogo italiano Filippo Silvestri describió de Málaga un nuevo género para la Ciencia de milpiés, Tonodesmus, con dos especies nuevas: Tonodesmus bolivari, encontrada en la Cueva del Hoyo de la Mina y dedicada al entomólogo español Cándido Bolívar, recolector de los ejemplares de Tonodesmus; y Tonodesmus robustior, edáfica, encontrada en el suelo de los alrededores de Málaga. Además, estas especies pertenecen a una familia tropical, los pirgodésmidos, no conocida entonces en ningún otro lugar de la Península Ibérica.
Todos los polidésmidos (orden al que pertenecen estos milpiés) son ciegos y viven en el suelo alimentándose de materia vegetal en descomposición, por lo que están preadaptados al ambiente cavernícola. Posiblemente, la Cueva del Hoyo de la Mina sirviera a Tonodesmus bolivari de refugio climático contra las glaciaciones hasta su destrucción en la actualidad por la actuación humana.