Lo confirmó el Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, en la rueda de prensa posterior a la reunión mantenida por los responsables de exteriores de la UE para analizar la situación de Afganistán y esa operación de evacuación no solo de los ciudadanos nacionales de cada país sino de los locales que ayudaron a las tropas europeas.
Son afganos a los que la Unión Europea “no puede abandonar a su suerte», dijo, y España se ha ofrecido a centralizar la recepción y distribución de todos ellos a cada uno de los países.
Borrell se mostró convencido de que la toma de Afganistán por los talibanes tendrá un “impacto amplio” en la seguridad internacional y en la geopolítica mundial, y abogó porque la UE trabaje “más activamente” con Estados Unidos y con otros aliados como Turquía o Rusia.
Aunque no ha habido tiempo para “conversaciones en profundidad” con ellos, Borrell anunció el envío de un “refuerzo” de la delegación en Kabul para poder abrir una “vía de diálogo” con los talibanes, con los que es necesario hablar de las personas que están en esa ciudad y que deben poder llegar al aeropuerto para salir del país.
En respuesta a una periodista afgana acreditada ante la UE que pidió con vehemencia a Borrell no reconocer al gobierno de los talibanes, Borrell precisó que “en ningún momento” ha afirmado que eso vaya a ocurrir, pero sí es necesario “mantener un diálogo con ellos”, precisamente para proteger a la población afgana y porque ellos consideran que “han ganado la guerra”.
En este sentido, afirmó en varios momentos que Afganistán sigue precisando ayuda internacional y la intención de la UE es poner “condiciones” que los talibanes tendrán que aceptar si quieren recibirla. La idea es “aprovechar todo lo que tenemos para hacer presión”. La conversación será “compleja”, reconoció, pero “es necesario llegar a esa cooperación”.
Borrell subrayó que la decisión de que las tropas occidentales abandonaran Afganistán la tomó el expresidente de EEUU Donald Trump tras un acuerdo con los talibanes, y ha sido aplicada por la administración de Joe Biden. Con esa decisión tomada, la UE se quedaba con una capacidad “muy limitada” para permanecer en el país.
Sin embargo, reconoció que la salida se podría haber gestionado “mucho mejor” y que se han cometido errores, como a la hora de calcular la capacidad de los talibanes para tomar el control del país.
Preguntado por si cree realmente que los talibanes de ahora sean diferentes a los de hace veinte años, respondió: “Desde aquí parecen los mismos, pero hablan muchísimo mejor en inglés”.