“Frente a los 23 ministerios del PSOE y Podemos, con cuatro vicepresidencias, la Comunidad de Madrid, motor económico de España, se regirá con nueve departamentos y ninguna vicepresidencia”, aclaró.
“Sé que esta decisión implica pedir muchos esfuerzos a mis consejeros y a sus equipos, pero el mensaje a la sociedad madrileña quiero que sea claro: si todos nos tenemos que apretar el cinturón, empecemos por los gobernantes”, indicó.
Por otro lado, señaló, la Comunidad de Madrid “se ha convertido en el primer muro donde se estrellan las políticas socialistas del Gobierno central”.
A su juicio, éstas “están haciendo de España un país desgajado, manoseado por los independentistas, sin socios en la comunidad internacional, desastrado económicamente y harto de unos gobernantes que viven de la propaganda y la mentira”.
Frente a esa acción política protagonizada por el Ejecutivo central, la presidenta en funciones dijo que “necesitamos una España viva y optimista frente a un país aturdido porque el Gobierno central no tiene rumbo, o no traza más caminos que los que le dictan desde la ultra izquierda, los separatistas y los herederos de ETA”.
Ayuso advirtió de que “esos caminos de Sánchez negociados en la oscuridad, sin ninguna transparencia, ocultos a la democracia, conducen al precipicio, que es donde parece que algunos miembros del Gobierno se preparan para saltar”.
Asimismo, hizo hincapié en que ante este contexto político “es preciso recobrar los valores de la transición democrática” y añadió que son precisamente esos valores los que hoy “desprecian numerosos dirigentes del Partido Socialista y sus socios de ultraizquierda”.
Consideró que “hoy vivimos tiempos anómalos en la política española” y que resulta “imprescindible que se deje de amenazar al poder judicial, a la prensa y a cualquiera que no se mueve a conveniencia de (Pedro) Sánchez”.