1ª Día. Rutita desde el Bosque subiendo por el cauce del río Majaceite, hasta Benamahoma (hijos de Mahoma), sólo 5 Km de ruta facilita.
Cuando comenzamos la ruta no dejaba de sorprenderme la cantidad de sitios y lugares que iban apareciendo, todos ellos con diferentes tonalidades de verde, acompañando con una música celestial del trinar de los pájaros y un fondo de cascada…
Lo divertido y emocionante del lugar no se puede describir con palabras, aunque si hubiera una que lo definiera sería MARAVILLOSO.
No podía imaginarme que solo con la naturaleza podía estar tan feliz.
Había algo contagioso en el ambiente, estábamos las 4 contentas, risueñas, y en cada rincón buscando buena luz para plasmar nuestras fotos.
El camino que supuestamente duraba 2 horas de ida, se alargó un poco más con las paradas, fotos, risas…
Cuando llegamos a Benamahoma, al final de la ruta, lo primero que te encuentras es una especie de vergel con mesas y sillas. Al pronto parecía un espejismo, pero cuando nos fuimos fijando vimos que era un barecito, con una estupenda terraza llena de vegetación y patos que rondaban a nuestro alrededor.
A la vuelta y ya algo cansadas intencionamos en no hacer muchas paradas, algo rapidito, y así lo hicimos. En 1 hora y media ya estábamos de vuelta otra vez en el Bosque.
La ruta ya se había terminado, pero después de haber respirado ese aire tan puro, esa naturaleza tan verde, esos trinos de pájaros, teníamos asegurado un descenso de estrés y buen humor que nos duraría todo el viaje. (continuará)…