- Un centenar de organizaciones ecologistas, sociales y sindicales se suman al manifiesto sobre la recién aprobada Ley de Cambio Climático y Transición Energética.
- Las organizaciones señalan que el texto actual no permitirá al Estado español cumplir con sus compromisos climáticos en 2030 como reclama la comunidad científica. Por lo que siguen reclamando una ley a la altura de la emergencia climática
Hace más de dos años que se inició la tramitación del Anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética que acaba de ser aprobado por el Congreso de los Diputados. Durante todo este tiempo las consecuencias de la emergencia climática avanzan, el planeta da cada vez más señales de graves alteraciones climáticas: las lluvias torrenciales, los episodios de sequía y los grandes incendios forestales siguen alcanzando enormes dimensiones y terribles consecuencias. De hecho, el año 2020 es nuevamente uno de los más cálidos jamás registrados.
Después de cinco años desde la firma del Acuerdo de París la ley climática falla nuevamente en atender las indicaciones científicas, lo que nos llevará a un incremento de la temperatura global muy por encima de 1.5C y 2 ºC. En 2019 la comunidad internacional y científica advirtió de la necesidad de reducir las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI) en un orden superior al 7,6% anual. Un ritmo de reducciones que debería llevar al Estado español a una meta de reducción de emisiones GEI superior al 55% en 2030 con respecto a 1990. Sin embargo, la ley recientemente firmada se limita a una escasa reducción del 23%, que se queda muy lejos incluso de lo que el mismo gobierno ha aprobado en las instituciones europeas. Este es un aspecto clave, que, por sí solo, hace que la ley nazca claramente obsoleta.
La responsabilidad ante la urgencia de la emergencia climática hace ser lo suficientemente prudente como para admitir la necesidad de aprobar una ley para hacerle frente, pero los contenidos con que se nos presenta llegan con más de una década de retraso. Existen avances como la prohibición de la minería de uranio y de las prospecciones de combustibles fósiles, la rehabilitación energética o el cálculo de la huella de carbono en el sector financiero, así como la incorporación de un objetivo 100% renovable, aunque solo para el sistema eléctrico y demasiado lejano. Sin embargo, la falta de concreción de algunas de las propuestas, el dejar a normativas posteriores objetivos fundamentales o la falta de apuesta clara por auténticos mecanismos de participación ciudadana ponen en riesgo los tímidos avances que se den en los próximos años.
A lo largo de estos más de dos años de tramitación numerosas personas se han movilizado en las calles exigiendo justicia climática, se han trasladado numerosas observaciones al texto, se han publicado numerosas notas de prensa y manifiestos reclamando medidas a la altura del reto que afrontamos. El texto final no recoge estas peticiones. De hecho, el proyecto de ley se ha debilitado durante este proceso al dejar la puerta abierta a los combustibles fósiles y permitir el uso del gas en todo el transporte, lo que es inadmisible.Tampoco contempla la eliminación de las subvenciones a los combustibles fósiles y medidas necesarias para frenar el incremento de los viajes en avión o la creciente e insostenible industrialización de la agricultura y ganadería.
Con la aprobación de esta ley se cierra una ventana de oportunidad para enfrentar de forma real la emergencia climática. Un momento para responder a la falta de medidas capaces de frenar un modelo de producción y consumo que genera el cambio climático, y que además, se demuestra incapaz de satisfacer las necesidades vitales de las personas, precarizándolas y poniendo en situación de vulnerabilidad a gran parte de la población mundial; de los ecosistemas y el resto de seres vivos que habitan este planeta.
En la ley se promete un proceso de revisión de sus objetivos, que ya hoy están totalmente desfasados, para 2023, reclamamos que se inicie ya un debate público y ciudadano sobre unos objetivos climáticos mucho más acordes. En este sentido seguiremos atentamente la gestión que se haga de la Asamblea Ciudadana por el Clima que contempla la ley, ya que, con la experiencia de los precedentes en Reino Unido y Francia, consideramos importante que se lleve a cabo con garantías de representatividad, independencia respecto a partidos y partes interesadas, transparencia, debate público y compromiso político con sus resultados, y no se limite a un simulacro.
La norma incurre además en las atractivas falsas soluciones del capitalismo verde, que nos hablan de los milagros imposibles y de los adelantos tecnológicos sin tener en cuenta su elevado coste energético y material ni los efectos sobre nuestras vidas. Por el contrario, es imprescindible reducir nuestro consumo de materiales y energía, acompañándolo de una redistribución del trabajo que garantice puestos de trabajo compatibles con una vida digna para todas las personas, y con la construcción de modelos basados en la cooperación, la solidaridad local y global, y la interdependencia de los cuidados esenciales.
Seguiremos luchando por el cambio necesario, un cambio que ponga en el centro a las personas, los cuerpos, los territorios y la Tierra, sin dejar a nadie atrás.
PLATAFORMAS FIRMANTES
Rebelión por el Clima
Xarxa per la Justícia Climàtica
ORGANIZACIONES QUE APOYAN:
Rellenar el link https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLSe0BNe7EoLXjEgjrHAy-Ti0DwSC4k8mcCOhBP3kZNw5NSdvbw/viewform ]
Abrir Brecha
Abrir Fenda
Acció Ecofeminista
Acció Ecologista Muntanyera
Alianza por el Clima IBIZA
Almáciga
Amigos de la Tierra
Amycos.org
Arcó. Asociación Rural Cepeda Órbigo.
Asamblea Antimilitarista de Madrid
Asociación de Investigación y Especialización sobre Temas Iberoamericanos
Asociación Ibiza Conciencia
Asociación Ibiza Ecologic
Asociación Libélula Verde
Asociación NOVACT Instituto Internacional para la Acción Noviolenta
Asociación Pro Derechos Humanos de España (APDHE)
Associació Catalana d’Enginyeria Sense Fronteres
Associació de Veïnes i Veïns del Clot-Camp de l’Arpa (BCN)
Associació de veïns i veïnes barri Rei En Jaume d’Alboraia
Associació per la Solidaritat/Plataforma de Suport Pers. Refugiades (Santa Coloma de Cervelló)
Associació Som del Barri
ATTAC España
Bosco Global
Bumerang Takeaway SL
CGT
CIDES
Climaccio
Col.lectiu Agudells
Colectivo Memoria Viva de los Pueblos
Colectivo Pensionistas de Avilés COSPA
Colectivo TURCÓN-Ecologistas en Acción
Consell de la Joventut de Barcelona
COODECyL Coordinadora de Organizaciones de Desarrollo Castilla y León
Cooperaccio
Coordinadora d’ONG Solidàries
Coordinadora Ecoloxista d’Asturies
Coordinadora per a la Salvaguarda del Montseny
DonesXDones
ECOAR))) Global
Ecologistas en Acción
Energetix Poble-sec
Entrepueblos/Entrepobles/Entrepobos/Herriarte
Eurosolar (seccions espanyola i catalana)
Extinction Rebellion Málaga
Extinction Rebellion Spain
Extinction Rebellion València
Federació d’Associacions de Veïns i Veïnes de Barcelona (FAVB)
Federación Gijonesa de AAVV
Feministas por el Clima
Fondo Verde
Fridays For Future- Juventud por el Clima
Fridays For Future Barcelona
Fridays For Future León
Fridays For Future Madrid
Fridays For Future Sevilla
Fridays For Future Vinaròs
Germanor Obrera d’Acció Catòlica
Greenpeace España
Grupo de Consumo La Vida Buena
Hort Fortalesa
Ingeniería Sin Fronteras
Intersindical Región Murciana – Medioambiente
Intersindical Valenciana
Justicia Alimentaria
KEM–MOC Bilboko talde antimilitarista
Lafede.cat – Organitzacions per a la Justícia Global
L’Animeta Associació per l’Agricultura Ecológica
La Villana de Vallekas
Madres por el Clima
Marxa Mundial de Dones
Movimiento Ibérico Antinuclear
Mugarik Gabe
Mujeres de Negro contra la Guerra (Madrid)
Mujeres de Negro contra la guerra de Sevilla
Obrir Escletxa
Observatori DESC
ODG
Ongd AFRICANDO
Plataforma Antitérmica La Pereda
Plataforma Aprofitem els Aliments
Plataforma Aturem la C-32
ProuTransit
Rebel·lió o Extinció Barcelona
Rebel·lió o Extinció Girona (XRGirona)
Rebel·lió o Extinció Gramenet
Rebelión por el clima Málaga
Red canaria de entidades de promoción e inserción sociolaboral ANAGOS (REAS Canarias)
Revo Prosperidad Sostenible
Salmorejo Rebelde
Secretariat diocesà de Pastoral Obrera de Barcelona
Servei Civil Internacional de Catalunya
SETEM Catalunya
Solidaridad Internacional Andalucía
Som Energia, SCCL
Stop Ecocidio España
Te lo sirvo verde
TeachersForFutureSpain/ profes por el Futuro
Tenik, asociación canaria para el fomento de la bioconstrucción y la recuperación del patrimonio arquitectónico
Xarxa Feminista (Catalunya)
XR Ibiza
UNA LLEI DEL CLIMA INSUFICIENT, UNA OPORTUNITAT PERDUDA
Hem d’insistir en la lluita per corregir la seva falta d’ambició
- Un centenar d’organitzacions ecologistes i socials se sumen al manifest sobre la recentment aprovada Llei de Canvi Climàtic i Transició Energètica.
- Les organitzacions assenyalen que el text actual no permetrà a l’Estat espanyol complir els seus compromisos climàtics en 2030, com reclama la comunitat científica. Per això segueixen reclamant una llei a l’alçada de l’emergència climàtica
Fa més de dos anys que es va iniciar la tramitació de l’Avantprojecte de Llei de Canvi Climàtic i Transició Energètica que acaba de ser aprovat pel Congrés dels Diputats. Durant tot aquest temps les conseqüències de l’emergència climàtica avancen, el planeta dona cada vegada més senyals de greus alteracions climàtiques: les pluges torrencials, els episodis de sequera i els grans incendis forestals segueixen adquirint enormes dimensions i terribles conseqüències. De fet, l’any 2020 és de nou un dels més càlids mai registrats.
Després de cinc anys de la signatura de l’Acord de París la llei climàtica falla novament a atendre les indicacions científiques, el que ens portarà a un increment de la temperatura global molt per sobre de l’1.5C i 2 ºC. En 2019 la comunitat internacional i científica va advertir de la necessitat de reduir les emissions globals de gasos d’efecte hivernacle (GEH) en un ordre superior al 7,6% anual. Un ritme de reduccions que hauria de portar l’Estat espanyol a una meta de reducció d’emissions GEH superior al 55% el 2030 respecte al 1990. Tanmateix, la llei recentment signada es limita a una escassa reducció del 23%, que es queda molt lluny fins i tot del que el mateix govern ha aprovat en les institucions europees. Aquest és un aspecte clau, que, per si sol, fa que la llei neixi clarament obsoleta.
La responsabilitat davant la urgència de l’emergència climàtica fa ser prou prudent com per admetre la necessitat d’aprovar una llei per fer-li front, però els continguts amb què se’ns presenta arriben amb més d’una dècada de retard. Hi ha avenços com la prohibició de la mineria d’urani i de les prospeccions de combustibles fòssils, la rehabilitació energètica o el càlcul de la petjada de carboni en el sector financer, així com la incorporació d’un objectiu 100% renovable, encara que només per al sistema elèctric i massa llunyana. Però, la falta de concreció d’algunes de les propostes, el deixar pendents els objectius fonamentals a normatives posteriors o la manca d’una aposta clara per autèntics mecanismes de participació ciutadana posen en risc els tímids avenços que es donin en els propers anys.
Al llarg d’aquests més de dos anys de tramitació, nombroses persones s’han mobilitzat als carrers exigint justícia climàtica, s’han traslladat nombroses observacions al text, s’han publicat nombroses notes de premsa i manifestos reclamant mesures a l’altura del repte que afrontem. El text final no recull aquestes peticions. De fet, el projecte de llei s’ha debilitat durant aquest procés al deixar la porta oberta als combustibles fòssils i permetre l’ús del gas a tot el transport, la qual cosa és inadmissible. Tampoc contempla l’eliminació de les subvencions als combustibles fòssils i mesures necessàries per frenar l’increment dels viatges en avió o la creixent i insostenible industrialització de l’agricultura i la ramaderia.
Amb l’aprovació d’aquesta llei es tanca una finestra d’oportunitat per a enfrontar de forma real l’emergència climàtica. Un moment per respondre a la manca de mesures capaces de frenar un model de producció i consum que genera el canvi climàtic, i que a més, es demostra incapaç de satisfer les necessitats vitals de les persones, precaritzant-les i posant en situació de vulnerabilitat a gran part de la població mundial; els ecosistemes i la resta d’éssers vius que habiten aquest planeta.
En la llei es promet un procés de revisió dels seus objectius, que ja avui estan totalment desfasats, per 2023, reclamem que s’iniciï ja un debat públic i ciutadà sobre uns objectius climàtics molt més adients. En aquest sentit seguirem atentament la gestió que es faci de l’Assemblea Ciutadana pel Clima que contempla la llei, ja que, amb l’experiència dels precedents al Regne Unit i França, considerem important que es dugui a terme amb garanties de representativitat, independència respecte a partits i parts interessades, transparència, debat públic i compromís polític amb els seus resultats, i no es limiti a un simulacre.
La norma incorre a més en les atractives falses solucions del capitalisme verd, que ens parlen dels miracles impossibles i dels avenços tecnològics sense tenir en compte el seu elevat cost energètic i material ni els efectes sobre les nostres vides. Per contra, és imprescindible reduir el nostre consum de materials i energia, acompanyant-lo d’una redistribució de les feines que garanteixi llocs de treball compatibles amb una vida digna per a tothom, i amb la construcció de models basats en la cooperació, la solidaritat local i global, i la interdependència de les cures essencials.
Seguirem lluitant pel canvi necessari, un canvi que posi en el centre les persones, els cossos, els territoris i la Terra, sense deixar ningú enrere.