En un contexto de campaña electoral en la Comunidad de Madrid, cuyos comicios se celebrarán el próximo martes, Greenpeace condenó «todas las amenazas que se están viviendo estos días» en España, con el envío de cartas amenazantes a dirigentes políticos, algunas de ellas con balas.
«En estos momentos, las miradas deben estar puestas en las garantías democráticas y de derechos. Sin éstas, es improbable abordar las reformas de calado que necesita el país. Avanzar hacia una transición verdaderamente justa y verde no será posible sin la calidad democrática de nuestro sistema», apuntó Greenpeace.
La organización subrayó que «la actual degradación de la calidad democrática forma parte de una tendencia mundial que tiene su reflejo en la reducción de espacio de diálogo social y el incremento de actitudes, discursos y prácticas autoritarias que ponen en la diana a los colectivos más vulnerables o a quienes defienden los derechos humanos».
«Los europeos conocemos bien el camino, a dónde nos lleva la normalización de los discursos de odio y los discursos contra el diferente. Es muy importante alzar la voz y recordar que no se pueden banalizar estas prácticas. Lo que está sucediendo es muy grave y requiere cohesión social», indicó.