Cada vez son más los dirigentes socialistas que muestran su preocupación por la situación del PSOE en Andalucía y urgen a que se dilucide el liderazgo en la federación ante el cuestionamiento interno a la actual secretaria general, Susana Díaz, y la única que afirma abiertamente estar dispuesta a pugnar por el mando del socialismo andaluz.
Desde algunos sectores, antes próximos a Díaz, se le reclama constantemente “generosidad” a la expresidenta para que facilite el relevo por cuanto entienden que está “acabada” y que no “tira del partido” en las encuestas, más que a la baja. Al tiempo, ven que se le acaban las opciones de ser “recolocada” por Pedro Sánchez por cuanto ha rechazado ya hasta “tres” posibles salidas.
Algunos dirigentes territoriales le han dicho directamente a la expresidenta de la región su apuesta por despejar la situación porque entienden no se puede mantener a la federación socialista más importante hasta final de año para celebrar primerias cuando en octubre hay un congreso federal.
Ven necesario ese “torniquete” que frene la “sangría” de votos que, encuesta tras encuesta, sufre el PSOE andaluz y que hacen temer un adelanto electoral en Andalucía. Y porque, entienden que, cuando más tiempo esté el partido en sus líos internos, “más nos abrimos en canal y luego cuesta más la sutura”.
“Es necesario cerrar lo antes posible la situación interna e iniciar una oposición y un proyecto alternativo”, reflexionan. Recuerdan que Díaz ganó las últimas elecciones pero con el peor resultado histórico del PSOE y su gestión al frente de la Junta cuestionada por la calle.
No obstante, algunas fuentes consultadas ponen en valor su campaña por los pueblos, su capacidad de trabajo y entrega, que le ha llevado a recorrer más de 50 localidades de todas las provincias andaluzas -salvo Sevilla-, con largas jornadas de cuatro y cinco pueblos en el mismo día.
Apuntan que eso le puede servir “para lo orgánico”, con un modelo similar al que empleó en su día Pedro Sánchez de ganarse a las bases del partido, pero no en su candidatura para “recuperar” la Junta de Andalucía por cuanto “no está haciendo oposición” a Juanma Moreno, que cada vez está “más asentado” como presidente y en las encuestas.
Es en este contexto en el que temen un “efecto Gabilondo” y que el presidente andaluz decida convocar elecciones, como ha ocurrido en la Comunidad de Madrid, con el partido y el candidato a otras cosas, y a lo que se suma la intención conocida de Ferraz de impulsar a Juan Espadas, actual alcalde de Sevilla, a la dirección del PSOE-A.
ESPADAS COMO FUTURO
Nuevamente estuvo esta semana por Madrid el alcalde socialista- con agenda institucional y de reuniones con el ministro de Política Territorial, Miquel Iceta-, en un momento en el que cada vez aumenta la presión en Ferraz para que Espadas confirme que se lanza a la carrera y se convoquen las primarias. De ese modo, si el alcalde sevillano se alza con la Secretaría General del PSOE-A tendría tiempo de presentar su candidatura y a conformar equipo y proyecto por si Moreno llama a las urnas.
Son ya “numerosas las agrupaciones locales», trasladan fuentes socialistas, las que piden adelantar la elección de la candidatura para cerrar esta situación que provoca momentos “incómodos”. Como los de los secretarios generales que reciben a Díaz en sus territorios, por lealtad institucional y “no porque la apoyen”, y los que se quejan de la tesitura que les coloca Espadas en las visitas que ya ha comenzado a hacer.
Y es que el alcalde sevillano -con el apoyo de Ferraz y su reclamo de marcar él los tiempos- se ha lanzado ya al tanteo presencial de apoyos, lo que también genera comentarios de que “el problema es en calidad de qué visita, porque aún no ha confirmado su candidatura», denuncian ‘pedristas’ andaluces y proclives a la alternativa en Andalucía.
Espadas estuvo precisamente esta semana en Huelva, donde algunos alcaldes se han posicionado “en contra” de adelantar el proceso interno porque “no toca” y reclaman que el partido se centre en la “realidad” que azota a los ciudadanos con la pandemia.
El PSOE-A realizará su congreso regional ordinario después del federal de octubre. Antes queda lo que se vislumbra como la “verdadera batalla», si la situación sigue igual, con la elección de compromisarios para el cónclave que se desarrollará en Valencia. Después, tocaría la elección del candidato a unas elecciones autonómicas que, si no se adelantan, tocarían en diciembre de 2023.
(SERVIMEDIA)