Sea por el uso, por la falta de cuidado o incluso por algún problema con la electricidad, los electrodomésticos acaban fallando. Las averías en el ámbito doméstico son de lo más habitual, y eso lleva a los propietarios a hacerse siempre la misma pregunta. Qué hacer, ¿reparar el electrodoméstico o comprar uno nuevo?
Cada vez más voces se decantan por la primera opción, y más ahora que las piezas oficiales bajan de precio. Puedes comprar repuestos originales Bosch en Fersay a precios de risa gracias a las propuestas digitales. Un aliciente para defender el argumento de la reparación por encima de la compra, aunque vamos a ahondar más en esto, explicando las razones por las que apostar por reparar en lugar de comprar, además de ver las facilidades para dar con piezas originales a buen precio.
Por qué apostar por la reparación de electrodomésticos
La respuesta más clara a esta cuestión es el precio. Comprar un nuevo electrodoméstico, en la mayoría de ocasiones, siempre será más caro que comprar las piezas que hacen falta para repararlo. Salvo contadas excepciones en las que se tenga algo ya obsoleto, que tenga un gran consumo energético y cuyas piezas sean difíciles de encontrar, siempre te saldrá más barato acudir a catálogos como el citado más arriba, comprar el recambio que necesites y reparar, sea por tu cuenta o con un profesional.
Obviando las reparaciones que entran dentro de garantía, en cuyo caso la marca se encarga de absolutamente todo sin que tengas que pagar ni un solo céntimo, en el resto de casos no solo ahorras dinero, también ahorras tiempo. Comprar un nuevo electrodoméstico implica deshacerse del que tienes, buscar uno nuevo y esperar a recibirlo. Eso requiere bastantes días y, en cambio, solicitar las piezas para reparar es algo que suele tardar mucho menos, con lo que eso implica en caso de que sea un electrodoméstico necesario en el día a día.
También hay que añadir a esto que no vas a tener que pasar por el proceso de adaptación a otro nuevo aparato, ya que a veces es algo que también exige cambiar la forma de hacer las cosas. Asimismo, otro factor muy importante es que, al optar por la reparación, estás optando también por la opción más responsable con el medio ambiente. La mayoría de electrodomésticos pasan a ser chatarra en vertederos cuando la gente se deshace de ellos, y esto es totalmente perjudicial para el entorno.
Busca siempre las piezas originales
A la hora de llevar a cabo la reparación de cualquier tipo de aparato, o incluso de cualquier mecanismo, lo más aconsejable en todo momento es contar con las piezas originales del fabricante. Es cierto que pueden existir reemplazos genéricos y que estos, por lo general, suelen resultar bastante más baratos. Se podría decir que existen lo que se conoce como «recambios de marca blanca». No obstante, aunque son una opción, no son la más recomendable si quieres que el arreglo sea duradero.
Y es que los recambios de este tipo, con piezas que no son las originales, suelen traer consigo más problemas a medio o incluso a corto plazo. Son piezas funcionales, sí; pero no están diseñadas concretamente para la máquina en la que se van a emplear. Salen más baratos al comienzo, pero a la larga salen caros estos arreglos porque vas a tener que contactar de nuevo con un equipo para que se ponga manos a la obra.
Lo peor, además, es que las piezas que no son originales pueden dejar de funcionar antes y esto, al mismo tiempo, provocar problemas en otras partes de tus electrodomésticos. Por eso, tenemos que insistir en acudir a lugares como Fersay. Este equipo no solo te ofrece los mejores repuestos originales de marcas como Bosch, sino que también cuenta con una amplia experiencia en el ámbito de los electrodomésticos, algo ideal si quieres reparaciones con buenos materiales y con la máxima garantía.
Usar las piezas originales siempre es aconsejable por las cuestiones de diseño y funcionalidad que hemos mencionado, pero también por calidad de los materiales. Obviamente son algo más caras que las genéricas, pero este precio se debe a que cuentan con materiales de mayor calidad y a un diseño más específico. Esto las encarece, pero, al mismo tiempo, asegura una vida útil mucho mayor, cosa que ayuda a que tus electrodomésticos sigan al pie del cañón durante mucho más tiempo. Y sí, también te hacen ahorrar más a la larga.
Ahora lo tienes más fácil y más barato. Puedes reparar tu electrodoméstico con piezas oficiales y con la mejor mano de obra con tan solo echar un vistazo en internet. Plataformas como Fersay ofrecen esta posibilidad para piezas de Bosch y otras tantas marcas, demostrando que no hay que complicarse para reparar un electrodoméstico con calidad y eficiencia.