Hay libros que tienen la capacidad de ser interpretados desde diferentes puntos de vista por distintas personas, como le ocurre a “Yo antes de ti” de Jojo Moyes.
Esta novela escrita en 2012 por la escritora inglesa es considerado por muchos como una de las historias más románticas que han leído en años, de esas que te roban el corazón y a la que acudes cuando necesitas leer algo que te recuerde que el amor verdadero existe.
Para otros (como es mi caso), en esta novela hay amor, sí, pero el mensaje que nos deja grabado va mucho más allá del simple hecho de que dos personas de distintos mundos acaben conociéndose y enamorándose.
“Te llevo grabada en el corazón, Clark. Desde el primer día que te vi, con esas prendas ridículas y esas bromas tontas y tu completa incapacidad para disimular una sola de tus emociones”.
Will es un joven que lo tiene todo: atractivo, con una carrera prometedora y con un futuro por delante que no tiene límites. Una mañana cualquiera de un día como otro en su vida, es atropellado y acaba tetrapléjico en una silla de ruedas
Louisa es contratada por los padres de Will para que lo ayude y lo anime a cambiar de opinión sobre una decisión que dice tomada y sin vuelta atrás: quiere que le practiquen la eutanasia.
En resumen, la novela ofrece dos vertientes, la historia de amor y el cómo enfrentarse a una situación donde la eutanasia sobrevuela y es un deseo de alguien a quien se ama.
Entre situaciones divertidas y otras dolorosas, Will y Louise congenian y el amor acaba llamando a sus puertas. Pero no quisiera centrar esta recomendación en la parte sensible y acaramelada, que afortunadamente no es tan alta en glucosa que haga saltar las alarmas. Mi intención es llamar la atención sobre el tema que centra la trama, que no es otro que la decisión de una persona a terminar con su vida voluntariamente.
“¿Por qué esta vida no es suficiente para ti? ¿Por qué no soy yo suficiente para ti? ¿Por qué no confiaste en mí? Sí hubiéramos tenido más tiempo, ¿habría sido diferente?”.
Louise trata de entender en que se ha metido y consulta distintas webs y grupos de apoyo. Lo más bonito de la novela son los mail y cartas que va descubriendo y escribiéndose con otras personas que ya han pasado por esa situación o que, como ella, se encuentran en medio del dilema.
¿Debemos intentar convencer a la persona que quiere acabar con su vida de que cambie de opinión? o ¿debemos respetar su decisión? ¿qué calidad de vida se le puede ofrecer? ¿qué grado de dolor estamos dispuestos a soportar? ¿es más importante su dolor o el nuestro?… infinitas preguntas azotan la mente de todos los personajes, y la del lector que los va conociendo. La visión que tenemos sobre el tema va pasando por diferentes etapas.
“¿Quiénes se creen los demás para decidir cómo han de ser nuestras vidas? Si esta no es la vida que quiere tu amigo, ¿no deberías estar preguntando cómo ayudarle a poner el punto y final?
Vamos a conocer la idea sobre el dolor y la situación que se nos plantea desde el punto de vista de todos los implicados: Will, su padre, su madre, su hermana, sus amigos, … todos ellos tienen sus miedos y sus dudas. Nadie sabe decidir quién debe tener la última palabra. Nadie es capaz de tomarla.
Una de esas lecturas que ayudan a comprender. No solo a aquellas personas que necesitan hacerlo porque estén pasando por lo mismo, sino a todos los que quieran tener un dialogo consigo mismo y analizarse ante una situación en la que no desearíamos estar pero que no sabemos si vamos a vivir en algún momento de nuestras vidas.
No es un libro de autoayuda. Pero como lectora, me vi envuelta en el debate mientras iba avanzando por las páginas y eso ayuda siempre.
Cuando Louise o la hermana de Will se plantean las diferentes opciones, tú lo haces con ellas. Cuando lees los diferentes puntos de vista de los padres de Will, tú los entiendes, comprendes a ambos y te posicionas con ellos. Aunque uno esté de acuerdo con la eutanasia y el otro quiera evitarla.
Es maravilloso como vas analizándote a ti mismo y como, al final, acabas preguntándote ¿Qué haría yo si fuera Will? ¿Qué haría yo si fuera su madre o su padre, o su hermana, o su pareja? Es una decisión muy importante y no basta con un sí o un no.
No todo es drama en la novela, porque Louise está contratada para cambiar la vida de Will pero éste cambiara también la de ella. La esperanza es una premisa siempre presente y la personalidad de Louise admite todo un mundo de posibilidades lleno de positividad, alegría y ganas de vivir.
Puede que sea necesario estar cerca del dolor y de la muerte para ver la vida desde otro prisma, disfrutarla y saborearla con otros sentidos.
Yo antes de ti tuvo tanto éxito que se ha convertido en una trilogía. Me gusta el mensaje positivo ante lo más doloroso de la vida.
