Continúa la destrucción del sector industrial y “el parón” en servicios provocado por la escasa actividad, consecuencia de la pandemia.
CCOO demanda el establecimiento de políticas activas de empleo, dotadas económicamente, que permitan contrarrestar la destrucción y que las distintas administraciones lleven a cabo un plan de industrialización en nuestra provincia que permita diversificar su estructura económica
Los datos de paro, referentes al mes octubre, son devastadores para la provincia de Málaga que sigue sufriendo un triple castigo tanto en número de personas desempleadas, como de contratos y afiliación a la seguridad social.
La secretaria de Formación y Empleo de CCOO Málaga, Patricia Laguna, ha señalado el hecho de que la última encuesta arroja alrededor de 191.000 personas desempleadas más en la provincia, un aumento del 4% con respecto al mes anterior.
La destrucción de empleo destaca en la industria, por la falta de infraestructuras que la potencien, y los servicios, como consecuencia de la COVID19. También se observa una subida en el colectivo sin empleo anterior, porque este mes se han incorporado muchas personas a un mercado laboral que no les puede ofrecer opciones. Dos crisis, la económica en 2008 y la actual, por motivo de la pandemia, están dejando en la estacada a nuestra población joven”, ha señalado Laguna.
Tampoco en la comparación interanual Málaga sale bien parada, ya que contamos con 47.000 personas más en el desempleo que en octubre de 2019. “La crisis sanitaria ha dejado ver que nuestro mercado de trabajo ha sido capaz de generar empleo pero también lo destruye muy rápidamente. A esto se añade que la mayor parte de la contratación actual es de tipo temporal: solo se está contratando para momentos o tareas muy puntúales, como vemos por ejemplo en la agricultura y la construcción”.
Laguna ha comparado los datos de afiliación a nivel nacional, dónde se registra un aumento de 45.000 personas, en contraste con Málaga que pierde 3.000 afiliaciones a la seguridad social, un dato que es una evidencia clara de la destrucción de empleo en nuestra provincia, a pesar de ser la quinta provincia española que ha aplicado más ERTE’s, la mayoría por causa de fuerza mayor. La sindicalista ha alertado de que esto implica que esta medida está conteniendo la destrucción de empleo, pero solo hasta el 31 de enero, fecha tras la cual las cifras aumentarán mucho.
Por eso la población malagueña necesita que la normativa obligue a las empresas a no destruir puestos de trabajo, lo que ha facilitado la reforma laboral de 2012, que requiere su derogación con urgencia. Además desde Andalucía se deben establecer políticas activas de empleo, dotadas económicamente, que nos permitan contrarrestar estas subidas del paro y bajadas de afiliación.
Por último, Patricia Laguna se ha referido al incremento en Málaga de personas trabajadoras que ya no cuentan con prestación por desempleo: “somos los que peores condiciones tenemos después de Cádiz y continuamos a la cola en tejido industrial. Por eso necesitamos mesa y diálogo social que nos permita mejorar cuanto antes la creación de empleo en nuestra provincia y diversificación de nuestro tejido productivo”.