El concepto de desahucios de okupas está bastante arraigado en todo el país y esto se debe, en gran parte, a que ha habido un enorme incremento en las ocupaciones. De hecho, en la actualidad, son muchas las personas que tienen temor de llegar a sus segundas reincidencias y encontrar que estas son ocupadas por personas desconocidas.
Afortunadamente, este es un problema que se puede solucionar por la vía legal, aunque puede llegar a demorar un poco. En primer lugar, tenemos que hacer en estos casos es analizar la situación y mantener la calma, ya que bajo ninguna circunstancia se recomienda seguir la vía de hecho.
Esta última es mejor conocida como “tomar la justicia por nuestras manos” y es, básicamente, tratar de restablecer la situación sin pasar por los tribunales. Esta no es una buena idea, ya que suelen haber Amenazas, intimidación e incluso ataques a quienes ocupan la vivienda.
De igual forma, puede llevar a otras situaciones como cambiar las cerraduras o sabotearlas, o bloquear el acceso a la vivienda aprovechando que los ocupas no se encuentran. Aunque, pueda parecer que estas son medidas aceptables es todo lo contrario, ya que no se suelen respetar los derechos de los demás.
Lo que debes tener cuenta es que, en la Constitución se establece el derecho fundamental a la inviolabilidad del domicilio. En este sentido, si lo que queremos hacer es sacarlos vamos a tener que optar por las vías legales, donde las autoridades comprobaran en qué situación se hallan y pasarán a desalojar la vivienda. De este modo, se les ofrecerá a los ocupantes asistencia social si la necesitan o sancionaran su conducta.
Regresando a la forma de actuar por nuestra cuenta, esto tiene sus riesgos y no es para nada recomendable, ya que podríamos terminar denunciados. De hecho, hay muchos casos donde el propietario termina condenado por coacción al intentar desalojar la vivienda por sus propios medios.
En este sentido, tenemos que irnos por la vía legal, y pueden pasar dos cosas, la primera es que todo el proceso sea rápido y la segunda, es que se alargue. En términos generales, el desahucio de okupas es muy rápido, pero en el caso de que los ocupantes no quieran colaborar este se va a largar por unos meses.
Para todo este proceso, es necesario conseguir un abogado especialista en okupas como los de JR Abogados. Es importante que sepas que existen muchos juristas especializados. En estos casos, pueden ser de mucha ayuda para agilizar todo el trámite por lo que consigue uno bueno y ahórrate tiempo. Al momento que te hagas con asistencia letrada, vas a tener que presentar dos denuncias.
En primer lugar, es la denuncia a la situación ante la policía, pero ten en cuenta que los agentes no podrán desahuciar a los okupas sin orden judicial. No obstante, serán de ayuda para el procedimiento, de hecho puede que los ocupantes de la vivienda, decidan marcharse al ver que inicias acciones legales.
La segunda denuncia es la de desahucio en los tribunales y al momento de que presentes esta demanda, las autoridades comprenderán que eres el propietario de la vivienda. Por ende, quienes la ocupan lo están haciendo sin título para ello. En todo esto, se tiene que proceder con las siguientes acciones, la primera es demostrar que eres el propietario o arrendador de la vivienda.
Lo segundo que se hará es notificar a los ocupas que se han comenzado acciones legales y que tienen 5 días para demostrar que son ocupantes legales. Al no poder demostrar dicha situación va a ser desalojados. Esto último puede llegar a demorar unos 30 días, como ocurre en Madrid.
Llegado el momento para que los ocupas salgan de la vivienda, si no lo hacen los policías serán los encargados de hacerlo. En este punto, ya puedes cambiar la cerradura y tomar toda las medidas que consideres necesarias.
A todo esto, se le debe añadir que, en ciertos casos, se puede pedir una indemnización al okupa, siempre que hayan descuidado o maltratado el inmueble. Esto es algo que se hace por la vía civil y debes tenerlo en cuenta ya que, si bien algunos ocupas cuidan de la vivienda, otros no lo hacen. Por ende, no te sorprendas de si ves algunas sorpresas desagradables en su interior.