La intención de Sánchez, según trasladan a Servimedia fuentes gubernamentales, pasa por acabar con la inviolabilidad que la Constitución otorga al Rey al incluirlo en su decisión de limitar «todos los aforamientos en el ejercicio del cargo», propuesta que defiende desde su primer Ejecutivo y cuando estaba en la oposición.
El presidente ya apunta esta idea en una entrevista con ‘Eldiario.es’ e ‘Infolibre’ cuando defiende que «claramente» la inviolabilidad «es uno de los preceptos sobre el que todos deberíamos reflexionar y ver qué solución le damos». «Evidentemente, la Constitución española tiene que evolucionar conforme a las exigencias de ejemplaridad y conducta política de las sociedades», afirma en la entrevista.
Además, el presidente apunta a «una reforma de la Constitución para revisar los aforamientos de los cargos públicos para que estén circunscritos a su actividad parlamentaria y no a otra». «Por tanto, creo que si eso lo defiendo para cualquier cargo público, lógicamente también para el jefe del Estado».
Sánchez reconoció en rueda de prensa desde La Moncloa que, con las informaciones sobre el Rey emérito, «estamos siendo testigos de informaciones que son perturbadoras».