Hace dos años, el Gobierno oficializó el 28 de junio como el Día Nacional del Orgullo LGTB, fecha en la que se conmemora la revuelta del Stonewall Inn de Nueva York en 1969, cuando la policía irrumpió en este ‘pub’ frecuentado por homosexuales desencadenando la que se considera la primera protesta origen del movimiento LGTB organizado.
El mítico pregón será virtual y no en la Plaza de Pedro Zerolo de Chueca, donde se suele celebrar. Eso sí, los organizadores piden a todo el mundo que engalane sus balcones con los colores del arcoíris. Y es que en esta edición se conmemoran los 15 años de la aprobación del matrimonio igualitario en España.
La manifestación se celebrará el sábado 4 de julio a través de Internet y sin carrozas. El lema será ‘Sororidad y feminismo para TRANSformar. ¡Mujeres lesbianas, trans y bisexuales en acción! ¡Por las más vulnerables!’ y se puede participar a través de la web ‘orgullolgtb.org’, creada por la Federación Estatal LGTB (Felgtb) y Cogam.
El propósito de la manifestación de este año, que no tomará las calles por la pandemia del coronavirus, será visibilizar a “mujeres lesbianas, trans y bisexuales”, quienes “ocuparán su espacio al frente de la lucha por los derechos del colectivo”. Así, la pancarta de cabecera de esta marcha virtual estará encabezada por activistas mujeres lesbianas, transexuales y bisexuales.
Además, la manifestación pretende trasladar que “no hay una única forma de ser mujer” y pondrá de manifiesto que “el feminismo no segrega, ni entre mujeres, ni entre personas, que no cuestiona identidades y que, como no puede ser de otra manera, es defensor de los derechos humanos”, a raíz de las tesis TERF, que excluyen a mujeres trans.
Por otra parte, en el marco del año temático ‘2020, Mujeres LTB: Sororidad y Feminismo’, se celebrarán varios directos a través de las redes sociales de Felgtb y Cogam para hablar de referentes en el activismo LGTB y de literatura orientada al colectivo.
“El Orgullo puede aportar una dosis de energía y un mensaje de superación y resiliencia, cualidades inherentes al colectivo LGTB, que ya ha tenido que lidiar con otra pandemia, la del VIH y con siglos de discriminación”, aseguraron los organizadores.
“No podemos olvidar que el Orgullo es, ante todo, visibilidad y reivindicación, y no queremos que este momento de crisis suponga un retroceso en los derechos y reclamos de las personas LGTB. Es precisamente ahora cuando muchas de las discriminaciones que sufrimos a diario se están agravando y quienes hasta ahora eran vulnerables, lo son aún más”, agregaron.
Según los promotores, el Orgullo LGTB movilizó el año pasado a 3,5 millones de personas en Madrid y reportó unos ingresos para la ciudad de alrededor de 200 millones de euros. En base a datos del Ayuntamiento de Madrid, la edición de 2018 atrajo a Madrid a más de 2 millones de personas y supuso “una gran inyección económica”.
(prensaldia.com)