Alejandro Navas (Málaga, 1995) se estrena en el mundo literario con su primera novela, Romper.
Publicado por la editorial andaluza Círculo Rojo, en este libro, el lector encontrará elementos de crítica a la sociedad actual desde un punto de vista muy particular. Mediante su protagonista, Silvio Chauca, la obra avanza por una serie de caminos que retratan las actitudes que rodean al concepto del éxito, las particularidades del mundo del fútbol, o los peligros que presentan los medios de comunicación.
Como punto importante, es necesario señalar que la gran parte de la trama se desarrolla en Málaga y alrededores. Una capital del Sol con bastante protagonismo que llega a convertirse en ciertos momentos en otro personaje más del repertorio que nos ofrece el autor. En Málaga, será donde el protagonista empiece a experimentar esas nuevas sensaciones que le hagan ser consciente de lo cotidiano y fácil que es ver surgir vicios que aparecen para cubrir carencias personales.
El texto también resultará realmente atractivo para cualquier aficionado al fútbol ya que, aunque el fútbol aparece trabajado como elemento secundario, todo seguidor de este deporte encontrará entre sus páginas un universo novedoso lleno de referencias a jugadores, entrenadores, y entidades reales.
Esta novela se publicó realmente en marzo de este año, pero debido a la situación extraordinaria provocada por la pandemia de Covid-19, su autor decidió interrumpir tanto el proceso de promoción como el de distribución. Ahora, con un mundo aún en plena incertidumbre pero que poco a poco va recuperando la normalidad, ya es posible adquirir un ejemplar de Romper en grandes superficies, librerías o venta online.
SINOPSIS
Silvio Chauca, a sus treinta y tres años, mantiene plena confianza en su forma de vida hedonista. Con la firme intención de obtener más tiempo libre para multiplicar sus placeres, decide establecer el punto y final a su etapa como jugador de fútbol.
Aunque su infancia estuvo rodeada por dificultades variadas, su primer triunfo fue mantenerse al margen de los problemas para centrarse en el deporte que lo llevaría al éxito que otros tanto desean. Pero de forma paralela a los goles, los campeonatos y las victorias, su mente también ha estado demasiado centrada en las mujeres, las fiestas, el sexo, los vicios y el más absoluto descontrol.
Con la retirada deportiva, por primera vez se abre ante él una nueva realidad que lo conducirá a descubrirse a sí mismo y a plantearse su lugar en un mundo donde las trampas de la sociedad y las fatalidades de la hipocresía son capaces de complicar la vida de cualquiera.
“Son moscas ansiando revolcarse en la mierda, solo que en esta ocasión, yo soy la mierda»