Tras varios meses de confinamiento y mucha dedicación, las empleadas de Clece de la Residencia Nuestra Señora de los Dolores de Villanueva del Trabuco reciben un homenaje por parte de los familiares de sus residentes.
– Ha sido un acto en el que se les ha entregado una placa, así como una carta de agradecimiento del gerente de Clece en Málaga, agradeciéndoles el gran trabajo que han realizado.
Durante la crisis sanitaria desatada en los últimos meses, las residencias de mayores han sido uno de los lugares más castigados por esta pandemia. Por ello, la gestión de estos centros ha sido una auténtica carrera de fondo para, mediante estrictas medidas de protección, conseguir que sus mayores se encuentren protegidos frente al coronavirus.
Es el caso de la Residencia Nuestra Señora de los Dolores de Villanueva del Trabuco, gestionada por la empresa Clece, que ha conseguido pasar las semanas más duras de la pandemia sin ningún caso de COVID19. Estos resultados no son fruto de la casualidad, sino de la perfecta coordinación de un equipo humano encabezado por su directora, Marta Guerrero, que desde el primer momento se han implicado al máximo para llevar a cabo todos los protocolos y nuevas formas de trabajar, para así conseguir los buenos resultados cosechados.
Tanto es así que los familiares de los residentes han querido homenajear a las empleadas de este centro, en agradecimiento por la labor desempeñada en estas semanas tan duras. El homenaje ha consistido en un acto íntimo, en el patio de la residencia, siguiendo las medidas de seguridad que recoge el Estado de Alarma, en el que les han entregado una placa de reconocimiento y una gran tarta que han podido disfrutar a lo largo del día.
A su vez, los familiares han invitado a la empresa Clece a sumarse a este agradecimiento y por ello, Pablo García, gerente de Clece en Malaga, ha querido estar presente en este acto para agradecerles en persona la inmensa labor que han realizado estos meses atrás, animándoles a que no bajen la guardia para garantizar la seguridad de los residentes. Además, les ha hecho entrega de una carta de agradecimiento por su trabajo, así como una siempreviva, una planta que se caracteriza por su fortaleza y su capacidad de resistir y adaptarse a entornos adversos, tal y como han demostrado estas profesionales.
En el acto también ha querido estar presente José María García, alcalde de Villanueva del Trabuco, quien también ha tenido unas palabras de agradecimiento a las empleadas de la residencia por su impecable trabajo en estas semanas.
Anticipación y comunicación, las claves del trabajo bien hecho
El 9 de marzo, antes de decretarse el Estado de Alarma, la Residencia Nuestra Señora de los Dolores decidió adelantarse y tomó la determinación de no permitir las visitas al centro de los familiares. Una decisión complicada que resultó ser clave para la gestión de la crisis que se iba a desencadenar en nuestro país y que los propios familiares entendieron a la perfección y agradecen enormemente a día de hoy.
Fue esta la primera de las medidas que se tomaron para garantizar la seguridad de los residentes, pero no fue la única. Desde el primer momento, directora, limpiadores, auxiliares, enfermera, terapeuta y todas las personas implicadas en el buen funcionamiento del centro se pusieron manos a la obra, con una dedicación admirable, para cumplir con todas las medidas necesarias, garantizando, por un lado, la salud de los residentes mediante una perfecta coordinación con el centro de salud y los médicos de enlace y, por otro, la tranquilidad de sus familiares con una constante comunicación con éstos a través de llamadas, videollamadas, e información en redes sociales.
Pero sin duda, una de las claves del éxito de esta residencia en la gestión de la crisis sanitaria ha sido su capacidad de, pese a la situación de emergencia y a todas las medidas que rompían la normalidad, hacer que los residentes continúen, en la medida de lo posible, su rutina diaria con total normalidad: talleres, celebraciones, eventos, que han hecho que estas personas especialmente vulnerables hayan podido pasar un confinamiento de calidad y alejados de grandes preocupaciones.
No bajar la guardia, la frase mejor aprendida
En estas semanas en las que parece que volvemos poco a poco a la normalidad, en esta residencia tienen muy presente que, pese a que ha pasado lo peor, no deben bajar la guardia en absoluto.
Por este motivo, en este centro se siguen cumpliendo estrictamente las normas de seguridad y prevención necesarias para garantizar la salud de sus mayores.
