Unidas Podemos ha elaborado un amplio programa de protección a los autónomos y las pequeñas y medianas empresas (Pymes) con medidas como la reducción del tipo impositivo del Impuesto sobre Sociedades a las empresas de menor dimensión en paralelo al aumento del tipo general para las grandes empresas y al establecimiento de un tipo efectivo mínimo para recuperar la recaudación del tributo.
Así lo ha puesto de manifiesto esta mañana la candidata número 2 de Unidas Podemos por Málaga, Eva García Sempere.
En España, existen más de tres millones de personas dadas de alta en el Régimen Especial de los Trabajadores Autónomos (RETA). Seis de cada diez trabajadores por cuenta propia o autónomos lo son como persona física y el 80% de estos “empresarios individuales” no tiene asalariados a su cargo.
Según los datos proporcionados por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social sobre las empresas inscritas en la Seguridad Social en enero de 2019, el 54% de las empresas no tiene asalariados, las microempresas (que tienen entre uno y nueve asalariados) representan el 39,6% del total, y las denominadas pequeñas empresas (entre diez y 49 trabajadores) suponen el 5,4%.
“¿Qué quiere decir esto? Que el 99% de las empresas en España o son autónomos o son de reducidas dimensiones, constituyendo un importante factor de crecimiento de la economía de nuestro país. Es muy difícil pensar en un escenario económico en el que autónomos y pequeñas empresas no sean protagonistas”.
Sin embargo, se enfrentan a una serie de problemas que se ven agravados, fundamentalmente, por su dificultad para acceder a recursos financieros y técnicos. “Efectivamente, el principal problema de autónomos y microempresas es el acceso a la financiación bancaria, dificultad que aumenta a medida que disminuye el tamaño de la empresa”.
Además, las crisis económicas y las políticas de ajuste agudizan los problemas de financiación y de falta de liquidez, porque autónomos y microempresas son muy sensibles al ciclo económico y a la evolución de la demanda interna. Los problemas de morosidad también les afectan con mayor intensidad por sus mayores dificultades para conseguir financiación a corto plazo. Los plazos establecidos en la Ley 3/2004, de 29 de diciembre, por la que se establecen medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales no se cumplen, ni en el sector privado ni en el público.
El hecho de que las cotizaciones sociales de los trabajadores autónomos sean un coste fijo independiente de los ingresos de su actividad es un obstáculo importante, sobre todo cuando se produce una caída de la facturación en su negocio o la actividad no se realiza a tiempo completo. Las ‘tarifas planas’ acaban por ser pan para hoy y hambre para mañana porque las prestaciones sociales del futuro del trabajador autónomo van a depender de lo cotizado.
Unidas Podemos trabajará a partir del 10 de noviembre para establecer un sistema específico de créditos por parte del ICO para autónomos y pequeñas empresas y la banca pública también prestará especial atención a su financiación. “También reformaremos el sistema de cotización a la Seguridad Social de los trabajadores autónomos para vincularlo a los ingresos reales de su actividad”.
Sempere ha destacado también entre la propuesta programáticas revisar el actual régimen especial del criterio de caja en el IVA para que sea un sistema efectivo de diferimiento del ingreso del tributo hasta el cobro de las facturas por parte del autónomo o empresa de reducida dimensión. También sustitucir progresivamente el sistema de módulos del Régimen de Estimación Objetiva del IRPF por el sistema de Estimación Directa simplificada. “Se establecerá un periodo de adaptación transitorio de tributación por módulos para negocios muy pequeños que destinen sus bienes o servicios exclusivamente al consumidor final persona física, con la posibilidad de poder optar al final del ejercicio en curso entre la estimación por módulos o la directa en el caso de acreditar pérdidas en dicho ejercicio”.
