Esta semana se conocía la noticia que Japón ha reanudado la caza de ballenas, con fines comerciales, después de 30 años.
Hasta ahora, este país había respetado la moratoria impuesta por la ‘Comisión Ballenera Internacional’, que prohibía la caza de estos animales con fines comerciales. Sin embargo, Japón anunció su retirada de esta organización en septiembre del año pasado, ya que considera que las especies minke, rorcual Bryde y rorcual común de estos cetáceos son abundantes.
La salida se ha hecho efectiva el pasado domingo, iniciándose la caza al día siguiente, a primera hora.
Ante esta situación, el senador de la ‘Asociación Parlamentaria en Defensa de los Derechos de los Animales’ (APDDA), Carles Mulet, ha preguntado al Gobierno qué medidas piensa adoptar la diplomacia española para exigir a Japón – y al resto de países que practican esta actividad – el cese de la caza ballenera, así como si tomará también medidas ante organismos internacionales.