La Policía Nacional ha detenido a dos personas por explotar laboralmente a ciudadanos pakistaníes en fruterías de Fuengirola (Málaga). Los arrestados explotaban a sus compatriotas aprovechándose de su situación de precariedad económica.
Así, realizaban contratos de trabajo fraudulentos a terceras personas que no trabajaban en los establecimientos a cambio de una remuneración. A los arrestados se les atribuyen delitos contra los derechos de los trabajadores, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
La investigación comenzó en junio de 2018 cuando un hombre de origen pakistaní denunció en dependencias policiales las condiciones de trabajo que mantenían, con horarios abusivos y salarios muy inferiores a los habituales en este tipo de comercios. Además se les descontaba del escaso salario la manutención y el alojamiento en viviendas de condiciones higiénicas lamentables.
Durante la investigación se confirmaron las condiciones laborales denunciadas y se comprobó que las jornadas de trabajo eran de 15 horas diarias, todos los días de la semana. Igualmente se pudo demostrar que al menos dos de los trabajadores que habían estado dados de alta en la Seguridad Social en las fruterías investigadas no habían trabajado nunca en ellas, siendo la finalidad de dichas altas el cobro indebido de prestaciones sociales por desempleo.
VENTA DE CONTRATOS
Los arrestados realizaban contratos de trabajo fraudulentos a terceras personas que no trabajaban para ellos a cambio de una remuneración. Estas personas utilizaban dichos contratos falsos para obtener la solicitud o tramitación de permisos de residencia, así como para percibir subsidios o prestaciones por desempleo gracias a los periodos de cotización en la Seguridad Social.
La Policía Nacional ha detenido a dos personas de origen pakistaní por delitos contra los derechos de los trabajadores, falsedad documental y pertenencia a organización criminal. Asimismo se han realizado cuatro entradas y registros, dos en domicilios particulares y otros dos en las fruterías donde trabajaban los explotados, para lo que se contó con la participación de la Inspección Provincial de Trabajo de Málaga para verificar las situación laboral de los trabajadores.
Los agentes han intervenido documentos de contabilidad, tarjetas de identidad y pasaportes de Pakistán además de un total de 4.160 euros. Igualmente, se identificó a un total de ocho víctimas de explotación laboral, dando cuenta de las condiciones en las que eran obligadas a trabajar residir.