4 de mayo 2019: 50 años de Siloísmo en Punta de Vacas, Mendoza, Argentina.
En este magno evento, estuvimos unos tres mil asistentes procedentes de los 5 continentes; humanistas, siloístas, mensajeros, familiares, vecinos, amistades y público en general celebrando los 50 años transcurridos desde aquel día de 1969, donde en plena dictadura, Silo – mendocino universal – decidió dar su mensaje al público. Ocasión que lo acompañamos a escuchar su arenga en la que amalgama el enmarque de su prédica proponiendo la superación del sufrimiento y la no-violencia; atender las necesidades descartando el deseo y nos deja una esperanza de alegría para seguir adelante en la historia, elevar el espíritu, y mucho más. Destacara luego el sentido pleno de vida y la misión de Humanizar la tierra. Continúa escribiendo, disertando, participando de actos, de reuniones, tanto en salas, como en una casa barrial, o en un café con amistades. Avanzando siempre en su propósito de dar nuevas y vitales referencias para optimizarnos como personas y como pueblos. Nos presenta el Nuevo Humanismo Universalista, y ya en su última etapa expone sobre la espiritualidad humana con el Mensaje de Silo; dándonos impulso a construir estos Parques de Estudio y Reflexión a fin de contar con lugares donde detener la vorágine cotidiana y profundizar en el fuero íntimo personal y compartir experiencias interesantes, significativas, con los demás. Siempre nos expresa ‘hacer cosas con otros’, aspirando a ser felices, útiles y libres.
En estos parques, salas y diversos lugares se pudo seguir on-line el acto por todo el mundo. Que culmina con relatos de magnificas vivencias. Como denota el testimonio de una nueva amiga emocionada: “siento que aquí se abren las puertas de la vida, mientras que fuera se cierran…”
Ernesto H de Casas, Mendoza, mayo de 2019
Texto de la celebración de los cincuenta años del Siloísmo en el acto más significativo que tuviera lugar en el Parque de Estudio y Reflexión Punta de Vacas, ubicado a los pies del Monte Aconcagua, en la Cordillera de Los Andes. Estas palabras y las ceremonias que les siguieron, fueron seguidas por streaming desde muchas diferentes localidades en los cinco Continentes.
Este 4 de mayo de 2019 se cumplieron 50 años desde que Silo pronunció su arenga “La curación del sufrimiento” en el paraje de Punta Vacas1 a los pies del Monte Aconcagua en Argentina. Allí existe hoy uno de los 50 Parques de Estudio y Reflexión construidos por impulsores de esta corriente en países de los cinco continentes.
En todos ellos se conmemoró esta fecha y estas son las palabras que en el Parque Histórico pronunciadas por Antonio Carvallo (y traducidas en forma consecutiva por Tony Robinson), uno de los miembros que participó activamente en el evento en 1969.
« ¡Queridas amigas y amigos, Siloístas, Peregrinos, viajeros y Maestros, aquí presentes, y en otros Parques en todos los Continentes! Bienvenidos a la celebración de nuestro cincuentenario, aniversario de la arenga pronunciada por Silo en éste mismo lugar el 4 de mayo de 1969.
Este es un día de celebración, de agradecimiento, de reflexión y revisión. ¿Por qué no? También ¡de consideración del futuro!
Escuchan a un participante en aquella ocasión, que nunca volvió a mirar atrás.
Nuestra historia común está profusamente documentada y no es este breve saludo la ocasión adecuada para profundizar en ella.
Quiero compartir simplemente algunos de los recuerdos y reflexiones que me acompañan en este período y en este mismo lugar el Parque histórico de Punta de Vacas donde tantos momentos cruciales de nuestro proceso han transcurrido.
Silo volvió a hablar públicamente aquí, en 1999, 2004 y 2007
Un breve recuento de estos cincuenta años:
Comencé a participar en Santiago en la segunda mitad de 1968. Tenía 22 años. Desde el inicio me impresionaron los materiales que circulaban en copias dactilográficas: el método, trabajos atencionales, teoría de la fuga, determinismo y azar, accidente y destino, teoría de la acción, materiales de notable profundidad para grupos espontáneos de activistas. Se decía que era posible romper el determinismo y avanzar hacia la libertad. Se hablaba del superhombre, del despertar de la conciencia, de la aparición de la Escuela. Había una actividad intensa en Santiago, operativos anunciando la venida de Silo, muchísimas reuniones y grupos de estudio y practica; invitación de nuevos miembros, y preparación de la movilización del 4 de mayo. Más de 70 viajamos desde Chile.
Así recuerdo aquel día. Había una expectativa muy grande y un sentimiento de incertidumbre, contrastando con la magnificencia del paisaje, guardias a caballo con metralletas, circundaban el terreno. Sabíamos que Silo iniciaba su vida pública y lanzaría su mensaje. Pero no más. Yo aún no le conocía…
El clima era electrizante, espectacular, imposible no sentirse muy conmovido de estar ahí. Silo, acercándose a los micrófonos con movimientos pausados y armoniosos, proyectaba una fuerza intensa, muy especial. Cuando en medio del silencio comienza con su mensaje “Si has venido a escuchar a un hombre…” fue para mí algo conmocionante. Desde ese momento mi atención tenía solamente un punto focal, no solamente la presencia de Silo expresando su mensaje sino la claridad de lo que iba explicando, la secuencia de ideas. Esto quedó tan profundamente grabado en mi corazón que es una vivencia que ha permanecido siempre y ha determinado el curso de mi vida.
La arenga me impresionó fuertemente por la variedad de temas que tocaba y su profundo significado… pero francamente, sólo con el pasar de los años, y la experiencia de muchos avatares fui comprendiendo a la arenga como una semilla continente de todos los códigos de esa fuente de conocimiento múltiple y diversa que es la doctrina hoy.
Revisemos rápidamente estos años.
El Libro “la Mirada Interna” iniciado allí en el valle, en la ermita de piedra y completado unos meses más tarde, fija ya permanentemente el fundamento de la enseñanza, elaborando en el sin sentido, la contradicción, el abismo y el modo de superarlo. La acción unitiva. La fuerza y su control. Afirmando como fuente, la experiencia de la revelación interior a la que llega todo aquel que medita cuidadosamente en humilde búsqueda.
A partir del 4 de mayo, se van organizando y multiplicando los grupos de seguidores en Chile y Argentina, se avanza en cualificación y se planean las primeras dispersiones sobre América Latina, Estados Unidos, Europa y Asia.
En 1972 Silo dicta en Santiago la Conferencia sobre Meditación Trascendental, interrumpida y suspendida al segundo día por una intervención policial. Era esta vez el régimen de la Unidad Popular.
Bajo la presión y persecución de las dictaduras militares en ambos países, que empujan a muchos seguidores al exilio, se refuerza la presencia de Siloístas en diversos países europeos.
En 1974 se establece un centro de trabajo en Córdoba, Argentina donde participan grupos de seguidores de Europa, Estados Unidos y América del Sur, para los primeros trabajos en oficios y disciplinas. Al año siguiente se abre un centro de estudios en Corfú, donde se desarrollan los primeros estudios de nuestra psicología, que se profundizan en las Islas Canarias en 1976 y 1978, con participación de amigos de todo el mundo.
Citando lo dicho por Silo aquí el 4 de mayo de 1999 al resumir 30 años de historia
“También en la década de los 70 comienza a articularse la organización de la Comunidad para el desarrollo humano…se trata de una organización social y cultural que con el correr de los años será reconocida por Naciones Unidas. Por este tiempo ya se fijan parámetros doctrinarios más precisos y se fijan las características de este nuevo tipo de movimiento que ya no puede ser confundido con el espontaneísmo, de otros grupos, a la sazón en franca decadencia y desintegración. Es a partir de la comunidad para el desarrollo humano que empieza a desarrollarse un numeroso conjunto de organizaciones sociales barriales y agrupaciones de base…Este Movimiento Humanista tan diversificado en sus actividades sociales y culturales también da origen a partidos políticos que empiezan a articularse recién en la década de los 80. Para la década de los años 90 el movimiento logra su plena madurez conceptual y se define como Humanismo Universalista o Nuevo Humanismo. Se diferencia netamente de los antiguos humanismos con los cuales no guarda relación orgánica ni ideológica. En este año que corre (1999) se apresta a realizar una completa evaluación de lo actuado desde sus primeros pasos y pretende definir su estrategia para el siglo que viene”.
Finalmente, en este siglo…
Se pone en marcha El Mensaje dado por Silo en 2002, con sus materiales, El Libro, La Experiencia y el Camino. Todo eso con sus respectivos modelos de funcionamiento y desarrollo, y su libre interpretación. Habilitando así una forma de trabajo basada en experiencia y capaz de alcanzar sin distinción a todos los seres humanos.
Se formaliza la Escuela, y se pone en marcha el trabajo sistemático de las Disciplinas como condición de acceso. Se fundan los Parques de Estudio y Reflexión como su lugar de asentamiento. Se realizan trabajos de nivelación abiertos a todos, y se trabaja en Disciplinas con un procedimiento acelerado y grupal.
Silo revisa toda su obra oficial y crea la página Silo.net (2)
Esa es la obra de la primera década del siglo, cuando Silo ya anticipa su partida y va alineando todo de cara a ese nuevo momento. Dijo en más de una ocasión, “¡Muchachos! Yo he hecho mi parte, ahora les toca a ustedes.”
En el segundo decenio se avanza en la construcción de Parques que ya pasan de cincuenta en todo el mundo, se expanden en todas partes las comunidades de El Mensaje de Silo. Donde hay condiciones favorables, se desarrollan los organismos oficiales del movimiento humanista: La Comunidad para el Desarrollo Humano, El Partido Humanista Internacional, Convergencia de Culturas, Mundo sin Guerras y sin Violencia, y el Centro Mundial de Estudios Humanistas. El Movimiento también cuenta con otras organizaciones, Foros, Marchas y una agencia de noticias, que crecen en muchos lugares.
¡Aquí estamos hoy!
Silo vivió su vida con nosotros, compartió todo, su estilo, sabiduría, su quehacer, su tiempo, su intención y proyecto.
En esta época compleja en que vivimos, de hecho, la más compleja en la historia humana hasta hoy, sin precedente. No había qué imitar. Siempre oteando el futuro, el proceso del mundo y sus tendencias, iba formulando nuevos caminos, aquellos con la mejor probabilidad, siempre en adaptación creciente hacia el destino de la obra común. Se adelantó al menos treinta años al proceso histórico. Vio venir la desestructuración y caída del imperio, y el advenimiento de la nación humana universal
Nos fue instruyendo, inspirando y orientando siguiendo un plan maestro de construcción, en un entorno de gran libertad, siempre proponiendo algo interesante, casi fuera de proporción con la cotidianeidad de nuestras vidas…
Conectó gente ordinaria, de la calle, del medio inmediato y la inspiró hacia dimensiones insospechadas, nos llevó a ver en cada uno de nosotros, seres excepcionales seres del futuro, sin tiempo, inmortales.
Nos expandimos por la tierra con el poder de esa visión y de la doctrina que se desarrollaba en todos los campos en una sinfonía de manifestaciones, diversas a la vez que estrechamente interconectadas. Tal cual es la vida humana.
Su sentido del humor, la vitalidad inextinguible, el cambio y renovación constante, su capacidad de relación y estructuración de las cosas iban construyendo nuevas realidades, miradas y paisajes. Los diálogos como sabemos podían durar varias horas ininterrumpidas, paseando la mirada y conectando entre si temas diversos y separados en el tiempo, y el espacio relacionando con ingenio y arte alrededor de nuestros intereses centrales. Así se elaboraban crecientemente los temas del momento, los amigos presentes tomaban apuntes, que luego de revisados se distribuían a todos.
Era la manifestación viva de la doctrina. Era la Escuela en acción.
Se desplazaba de continuo por todos los lugares de actividad del Movimiento. Reuniones semestrales en ambos hemisferios para facilitar la participación. Planes minuciosos, estadísticas continuas de todo lo realizado. El Movimiento se informatizó tan pronto como los primeros ordenadores personales salieron al mercado. Nunca dejó una carta, una llamada o un mail sin responder velozmente. Producía frecuentemente nuevos escritos doctrinarios o revisiones y ampliaciones de los ya existentes. Charlas, análisis y proyecciones sobre la situación social, política, psicológica, de la gente, siempre tomando muestras.
La recreación constante de temas, modalidades y entornos de trabajo constituían una fuente permanente de inspiración. En momentos operando sobre el mundo, en otros momentos, sobre cualificación y estudio. La comunicación con los demás, la enseñanza de lo aprendido eran no obstante, el centro de toda acción de todo plan de todo diseño de trabajo.
Rescata y destaca, siempre desde la doctrina, afinidades con corrientes de pensamiento en otros momentos históricos, el proceso del pensamiento, arrancando desde los mitos raíces de la humanidad.
En su enseñanza vi siempre una gran humildad y genuino reconocimiento del esfuerzo y talento de las generaciones que nos precedieron. Con tremendo sentido de integración, de estructura.
Silo es el modelo de conducta, el guía y el amigo. Permanece siempre copresente guiando e inspirando la acción.
Hoy esa experiencia es viva, se reconstruye, reestructura y transforma. Me inspira e impulsa, es el mito actuando en mi conciencia. Cuanto más se transforma más se modifica mi comprensión de la enseñanza. Y consecuentemente de la realidad.
Que potente es la experiencia viva y actuante que llevamos con nosotros.
Habiendo sido parte y testigo del proceso de nacimiento, y desarrollo de la doctrina en el tiempo, y experimentando cada día el impacto de su extraordinaria verdad, amplitud y profundidad, puedo afirmar sin duda que es la más completa, sabia, profunda, clara y bondadosa de las doctrinas de transformación, capaz de conectar al ser humano con lo sagrado en la profundidad de su conciencia.
Pero no sería completa esta celebración sin el reconocimiento mutuo y agradecimiento desde el fondo de nuestros corazones por el gran trabajo realizado codo a codo en estos años que ha dado sentido a nuestras vidas y ha permitido a otros el descubrimiento de la más grande de las enseñanzas.
El mundo cambió. Una nueva sensibilidad está en marcha. Hoy son los niños quienes toman la iniciativa de confrontar al sistema de manera no violenta enfrentando los problemas más serios que afectan a la humanidad. Hoy es el medio ambiente y la supervivencia en el planeta. Muy pronto será el tema de la violencia que, como sabemos, está en la raíz de toda destrucción, y del sufrimiento individual y social.
Una civilización mundial cubre el planeta, la tecnología conecta a cada persona en tiempo real, todo se acelera de modo creciente sacudiendo los cimientos del psiquismo humano. Sin embargo, esa misma tecnología hace posible alcanzar hasta el último rincón de la tierra, con nuestro mensaje de cambio, de fe en el ser humano, de superación del sufrimiento. Con alegría, amor al cuerpo, a la naturaleza, a la humanidad y al espíritu.
Tuvimos el privilegio de ser parte del nacimiento y desarrollo de la más grande de las enseñanzas con Silo como Maestro y Guía. Ahora nos toca a nosotros comunicar esa enseñanza universal que la humanidad necesita, realmente.
Apoyémonos todos en esta gran tarea solidariamente y con sincero afecto.
¡Paz Fuerza y Alegría!»
1969