Si alguno dice que va a pasar unos días a Cádiz y busca alojamiento, quizás le miren como un bicho raro. Y es que en la tacita de plata dormir lo que se dice dormir, se duerme poco. De origen fenicio, es la ciudad más antigua de todo el mundo occidental. Si se remontan a la historia de la ciudad, comprobarán que la fundaron los fenicios allá por el 1.100 a.C. y enseguida se volcaron en el comercio a través de un puerto que en la actualidad sigue activo y con una actividad que no ha cesado en estos tres milenios. Prueba de ello son las Torres Vigías que aún existen en algunas casas gaditanas y desde las que los comerciantes oteaban el horizonte a la espera de ver llegar sus navíos cargados de mercancías desde el Nuevo Mundo. Hay incluso, y con algo de mucha razón, quién la compara con La Habana. Algunos conocerán aquella copla, Habanera de Cádiz, que popularizó Carlos Cano de un poema del escritor Antonio Burgos, y cuyo estribillo daba fe de este parecido: “La Habana es Cádiz con más negritos, Cádiz La Habana con más salero”.
Sea como fuere, si hay una provincia donde lo ideal es conocerla en la calle, paseándola y mezclándose con sus gentes, esa es Cádiz sin duda. Quizás la mezcla de tantas civilizaciones y la cercanía al mar, siempre abierta y de cara a él, le han dado ese carácter abierto y cordial donde nadie es extraño o forastero. Compruébenlo y disfruten con ello, porque es una experiencia inexplicable e inolvidable. Pero en Cádiz aparte de Carnaval y playas, también se puede disfrutar de unas rutas casi desconocidas quizás porque lo folklórico y vacacional prevalece sobre otros aspectos interesantísimos. Como suele suceder en todas partes, hasta los propios residentes en ocasiones son desconocedores de la riqueza que sus lugares de origen o residencia poseen. Y piensen ustedes, por ejemplo, en la cultura árabe en esta provincia donde dejaron huella y de gran valor artístico y cultural.
Dedicar una jornada a recorrer las huellas que dejaron en la casi totalidad de las poblaciones de la provincia es una sorpresa inesperada para todos los amantes de la historia que visitan Cádiz. Son innumerables las rutas que el Legado Andalusí dejó en la provincia y que ustedes podrán descubrir.
Al final sí que necesitarán alojamiento, porque un día es y les sabrá a poco. En Cádiz hay de todo tipo y precio, y como provincia donde la playa y los deportes acuáticos tienen gran relevancia, encontrarán algunos que no hay en otros lugares. Y además tiene sierra y preciosa con sus rutas de los Pueblos Blancos. Así que antes de perderse en la oferta y no saber qué ni dónde elegirlos, entren en alojamientos en Cádiz, y ahí encontrarán el suyo. Los tienen todos.