La abogada de los padres de Julen, el niño de dos años y medio que fue encontrado sin vida 13 días después de caer en un pozo en Totalán ha presentado un escrito en el juzgado encargado del caso en el que pide la continuación del procedimiento que se dirige contra el dueño de la finca donde está dicha prospección, David Serrano, investigado por un presunto delito de homicidio imprudente; sin necesidad de realizar más diligencias de prueba.
Así lo han informado a Europa Press fuentes judiciales. Este escrito se presenta a raíz de que la jueza de Instrucción número 9 de Málaga, que lleva el caso, pidiera a las partes que se pronunciaran sobre la continuación del procedimiento, si solicitaban más diligencias o si pedían el sobreseimiento.
La instructora solicitó este pronunciamiento tras presentar los forenses el informe definitivo de autopsia, que concluye que la causa de la muerte fue la caída en el pozo y que descarta que la acción de la piqueta usada en el rescate incidiera en el fallecimiento, tal y como sí apuntaba un estudio técnico aportado en su momento por la defensa de Serrano.
Julen cayó el domingo 13 de enero a un pozo de tan sólo 25 centímetros de diámetro y de algo más de 70 metros de profundidad. Su cuerpo fue encontrado a las 01.25 horas de la madrugada del sábado 26 de enero por los equipos de rescate que lo buscaban desde el momento del suceso; y a las 03.29 horas se logró subirlo a la superficie.
En el informe definitivo de autopsia, de 25 páginas, los forenses concluyen que el motivo inmediato de la muerte fue un traumatismo craneoencefálico y raquimedular y que «la causa fundamental fue precipitación», apuntando que el tiempo de supervivencia del pequeño «fue corto», ya que fijan el fallecimiento alrededor de las 13.50 horas, a los «pocos minutos» tras la caída.
