La candidata de Unidas Podemos asegura que su coalición debe estar en el Consejo de Ministros para garantizar el apoyo del Gobierno
Unidas Podemos en el Estado y Adelante Málaga en el Ayuntamiento de la capital son las únicas fuerzas que pueden garantizar que no se construya el rascacielos del Puerto, ha anunciado esta mañana el concejal y candidato a la Alcaldía de la capital, Eduardo Zorrilla, durante la rueda de prensa en la que han dado a conocer las alegaciones presentadas a la modificación del Plan Especial del Puerto.
Esta certeza por parte de Zorrilla se basa en los cuatro años de oposición clara y pública al proyecto de construcción de un rascacielos, que consideran insostenible desde el punto de vista económico, turístico, medioambiental y paisajístico.
Las alegaciones al Plan están apoyadas por numerosos expertos, profesionales universitarios de diversos campos, etc. “Creemos que este proyecto no tiene el consenso necesario; que tiene una gran oposición que va mucho más allá que lo que se ha manifestado en las instituciones públicas. Hasta ahora ha sido apoyado por el Partido Popular, Ciudadanos y el partido socialista, mientras que miles y miles de malagueños y malagueñas, nos atreveríamos a decir que posiblemente una mayoría de la ciudad, se oponen”.
El concejal malagueño entiende que al igual que Adelante Málaga lleva en su programa la no construcción del edificio, espera que el resto de partidos pongan expresamente que apoyan este proyecto, “para que los ciudadanos a la hora de ir a la urna tengan elementos para valorar a que partido político prefieren votar”.
Por su parte, la diputada malagueña y candidata de Unidas Podemos, Eva García Sempere, reafirma estas palabras explicando que sólo con la presencia de su formación en el Consejo de Ministros se garantiza que no se construya el rascacielos.
Ha añadido que en estos momentos hay debates abiertos sobre los problemas energéticos de los rascacielos e incluso los expertos advierten de los problemas que acarrean estos edificios en primera línea de costa. También que hay muchas más razones de índole económica, social y cultural y que los usos públicos del Puerto deben ir encaminados al aumento de fuerzas productivas, primando el interés general.
Sempere ha lanzado una pregunta retórica sobre cómo van a proteger el patrimonio inmaterial, aquellos que tira en material, que es más tangible, en referencia a los últimos edificios demolidos como La Mundial.