La sátira de Joglars ‘Señor Ruiseñor’ llega este fin de semana al Teatro Cervantes de Málaga. Se trata de una fábula con la que reivindican el cosmopolitismo y la universalidad de la Cataluña cívica y culta tomando el ejemplo del polifacético artista Santiago Rusiñol.
Ramón Fontserè, Pilar Sáenz y Dolors Tuneu, acompañados por el director-gerente del espacio municipal, Juan Antonio Vigar, han presentado este jueves en rueda de prensa su nueva obra, que cuenta con la colaboración del CDN y del Teatro Calderón de Valladolid, donde fue estrenada el pasado mes de noviembre.
«Rusiñol representa un mundo y un espíritu que no ha sido reemplazado. La sensualidad, la belleza y la vida alegre que él encarnaba han desaparecido. Queremos enfrentar aquella Cataluña de Rusiñol con la de ahora y reivindicar el arte como patria universal frente a las patrias identitarias», ha señalado Fontserè, que dirige y protagoniza esta función junto a Pilar Saénz, Dolors Tuneu, Juan Pablo Mazorra, Rubén Romero y Xevi Vilà.
‘Señor Ruiseñor’, pieza escrita por Fontserè con la colaboración de Tuneu y Alberto Castrillo-Ferrer, comienza cuando un jardinero de Parques y Jardines debe dejar el trabajo por culpa del reúma y es reubicado en el Museo Rusiñol, donde interpretará al pintor y escritor presentando las visitas teatralizadas.
La acción se sitúa en el museo del destacado intelectual y bohemio catalán, considerado padre del Modernismo, que se está desmantelando para transformarlo en el Museu de la Identidad. El antiguo jardinero se convierte en Rusiñol sufriendo alucinaciones provocadas por la morfina a la que también era adicto el pintor, unos delirios que sirven para construir «una mordaz crítica sobre la Cataluña actual frente a la culta, cosmopolita y cívica que él representó».
La obra llega al escenario del Cervantes el sábado 30 y el domingo 31 –20.00 y 19.00 horas respectivamente, con entradas entre nueve y 24 euros– dentro de una gira que recorrerá varios puntos de España y ya se ha representado en el Teatro María Guerrero de Madrid, el Principal de Alicante, el Principal de Zaragoza, el 42 Festival de Teatro de El Ejido y la población barcelonesa de Canovellas, entre otros.
El montaje se apoya en un espacio muy funcional y visual, con coreografías y proyecciones de los cuadros de Rusiñol y diseñado para resaltar el trabajo del elenco actoral. Anna Tusell firma la escenografía, centrada en torno a un óvalo inclinado, y Castrillo-Ferrer la dirección de escena.