Cerro del Espino
“Nosotros vamos allí con la intención de ganar, esté el partido como esté, esté la situación como esté o esté la climatología como esté; no podemos ir a excusarnos o cuando acabe el partido decir que el campo estaba muy mal. Si decimos que el campo estaba muy mal es que la situación no fue bien. Hay que intentar ganar como esté el campo”.
El Rayo, un equipo ‘tocón’
“Si ellos quieren tener el balón, una forma de hacerles daño es intentar quitarles el balón. Sabemos que es un equipo que le gusta tener posesiones largas y mucho toque con balón. Tenemos que hacer un partido muy completo, un partido bueno con balón para minimizarles ese punto fuerte que tienen, y hacer un partido bueno sin balón porque sabemos que es un punto fuerte cuando lo tienen. El partido te va a exigir tener buen ataque y tener buena defensa. No vale con una de las dos partes”.
El entorno, fundamental
“Queda mucho pero cada vez es poco, o poco pero cada vez es mucho. Ahora ya es cien por cien cada partido, cada partido es el último y esos tres puntos son vitales. El equipo que se adapte mejor a las situaciones y sepa vivir todos estos momentos finales con tranquilidad esos equipos tienen ventaja. El apoyo y el ambiente en casa que sea como la primera parte del otro día, en un ambiente que el equipo volaba. El equipo era rápido, intenso, duro, tal… Esos ambientes nos benefician mucho y en casa lo esperamos sobre todo para esos partidos que son vitales”.
Unidad para los objetivos
“Esto es el Málaga Club de Fútbol, esto va por encima de todo lo demás. Entre todos tenemos que intentar conseguirlo. Estamos en una buena disposición para poder conseguirlo, necesitamos de ese empujón final y en lo que nos toca a nosotros dar todo y no ahorrar ni una gota de esfuerzo ni sudor durante los noventa minutos de cada partido. El otro día se vio un equipo que lo deja todo en el terreno de juego. Entre todos somos más fuertes”.