El presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, ha firmado hoy el decreto de remodelación del equipo de gobierno de la institución provincial, nombrando a Jacobo Florido y Francisco Oblaré como vicepresidentes segundo y tercero, respectivamente.
De esta forma, Kika Caracuel pasa a ser ser nombrada vicepresidenta primera en la nueva estructura organizativa, además de mantener las delegaciones de Economía, Hacienda y Relaciones Institucionales.
En el caso de Florido, además de la vicepresidencia asumirá el Área de Servicios a la Ciudadanía que dirigía Ana Mata, que engloba Participación y Cooperación Internacional; Medio Ambiente y Promoción del Territorio; Sostenibilidad; Servicios Sociales y Centros Asistenciales; Cultura y Educación; Deportes y Juventud. A estas competencias se añade la supervisión de Madeca y Gobierno Abierto, Transparencia y Comunicación Corporativa.
Por su parte, Oblaré suma este nuevo cargo a los actuales de portavoz del equipo de gobierno y de delegado de Fomento e Infraestructuras, además de la supervisión de la Oficina de Atención a los Alcaldes.
Además de los cambios que afectan a las vicepresidencias Salado ha acometido otra serie de modificaciones de menor envergadura por las que ciertas delegaciones varían de diputado.
De este modo, las competencias de la Administración Electrónica, dependientes de Caracuel, las asumirá a partir de ahora la diputada delegada de Recursos Humanos y Servicios Generales, Pilar Fernández-Figares.
La diputada Lourdes Burgos sumará a la delegación de Servicios Sociales y Centros Asistenciales, la gestión directa del área de Innovación Social donde está incluida la Noria, e Igualdad.
Por último, el nuevo diputado Juan Jesús Bernal, asumirá la delegación de Desarrollo Económico y Productivo, que tiene asignadas las áreas de la marca de promoción agroalimentaria Sabor a Málaga y Relaciones Empresariales.