El Festival de Teatro de Málaga recibe a Juan Echanove convertido en Rothko y a Caramala con su apuesta por un humor más ácido y con componente social.
El 36 Festival de Teatro de Málaga acoge a Juan Echanove transmutado en Mark Rothko en ‘Rojo’. La laureada obra del dramaturgo y guionista John Logan sube por primera vez a los escenarios españoles con Echanove encarnando al gran pintor del expresionismo abstracto y con Ricardo Gómez como su ayudante.
El propio protagonista dirige esta inmersión en unos tiempos de encrucijada creativa y vital de Rothko, con la muerte acechándole y su generación en decadencia, apabullada por el protagonismo que estaban adquiriendo los artistas plásticos del Pop Art. ‘Rojo’ se representa este sábado y domingo 3 en el Teatro Cervantes.
Por otro lado, Carmen Baquero, Virginia Muñoz y Noemí Ruiz regresan al Teatro Echegaray para estrenar ‘La plaga’, un viraje hacia un humor más ácido y enhebrado con la realidad social a través del relato de las consecuencias en las relaciones entre profesores, alumnos y padres de una invasión de piojos en un colegio.
Las tres Caramala intervinieron como conductoras de la gala inaugural del teatro de la calle Echegaray, allá por 2009, y después presentaron allí sus dos primeros montajes, ‘Caramelo’ y ‘La hora feliz’, y compartieron tablas con Javier Ojeda en la ‘mambópera’ Barrio de la Paz, han recordado a través de un comunicado.
Ahora tiñen de oscuridad y sabor agridulce su habitual humor blanco y fresco con esta pieza de creación colectiva que partió de una idea inicial de su habitual dramaturgo y director, Sergio Rubio, y que han escrito y ensamblado a través de improvisaciones en los ensayos, con la aportación de Rubio, las tres actrices y el director, el también malagueño Chiqui Carabante. El estreno de ‘La plaga’ será a las 20.00 horas de este lunes, día 4, y el martes 5 de febrero.
El fin de semana del Festival de Teatro se completa con el estreno del Espejismo de ‘El Espejo Negro’, con ‘Pedro y el lobo’, versión de Etcétera Teatro del cuento popular ruso musicado por Prokofiev y con las representaciones de ‘Hambre en el Museo del Vino’. En los tres casos, con el aforo totalmente ocupado.
