La elección se hace en el marco de la campaña Inclusive Cities for all que impulsa la Red Eurocities y quiere poner de manifiesto la apuesta estratégica de las ciudades en favor de una Europa más cohesionada socialmente.
La reserva del 30% de vivienda social en las nuevas promociones o el proyecto B-Mincome son dos de los proyectos que Barcelona expone en Europa como ejemplos de una apuesta estratégica para avanzar en la construcción de sociedades más justas
El Ayuntamiento de Barcelona ha elegido la renta básica, por un lado, y la vivienda y la asistencia al sinhogarismo, por la otra, como los dos compromisos más destacables de la ciudad dentro de los 20 principios que conforman el Pilar Social Europeo .
El compromiso con estos principios la ha formalizado la teniente de alcaldía de Derechos Sociales, Laia Ortiz, con la firma oficial de los documentos. Este mismo paso lo están haciendo otras ciudades europeas, en el marco de la campaña Inclusive Cities for all que impulsa la Red Eurocities, que será presentada oficialmente el próximo 21 de febrero en Bruselas en un acto que tendrá lugar en el Parlamento Europeo.
A este evento está previsto que asista igualmente Laia Ortiz, representando la ciudad de Barcelona y también como presidenta del Foro Social de la Red Eurocities durante dos años y hasta el pasado mes de noviembre. Durante este periodo, la teniente de alcalde ha liderado las reivindicaciones del movimiento municipalista para hacer del Pilar Social Europeo una herramienta efectiva que tenga repercusiones palpables en la defensa de los derechos sociales en las ciudades.
El Pilar Social Europeo, aprobado por los dirigentes europeos en noviembre de 2017 en la Cumbre Social de Gotemburgo, establece los 20 principios y derechos sociales básicos que deberían guiar la acción política en Europa para alcanzar mercados de trabajo y sistemas de protección social lo más equitativos posible.
Es el primer paso que ha hecho la Unión Europea para definir unas políticas sociales comunes y, desde la Red Eurocities, Barcelona ha trabajado intensamente para conseguir que el mundo local tenga un papel clave no sólo en la definición de estos principios, sino también en su implementación. De hecho, como administraciones más cercanas a las personas, las ciudades son en gran parte las encargadas de poner en marcha las políticas sociales diseñadas a nivel supramunicipal. Por esta razón,
Con la campaña de las ciudades mostrando su compromiso con los principios del Pilar Social Europeo, la Red Eurocities quiere pedir igualmente que los fondos estructurales europeos a partir del año 2020 vayan destinados a reforzar las políticas sociales.
Esta petición llega en un momento muy concreto, en el que están cerca las elecciones europeas del próximo mes de mayo, y ante la amenaza que representan determinados partidos extremistas y antieuropeístas, con discursos que absolutamente en contra de lo que representa la idea de una Europa inclusiva y cohesionada.